Jardín Botánico: Entorno natural con miradores al río

En 1981, cuando abrió sus puertas a instancias de un grupo de vecinos y mediante la donación de tierras que realizó Oscar Adam, las once hectáreas que lindaban con el arroyo Zaimán ofrecían un paseo único con la posibilidad de avistar distintas especies de flora y fauna local.

En 1988, por ordenanza municipal, se le asigna el nombre de Alberto Roth, en homenaje al conservacionista suizo de reconocida trayectoria en el cuidado del medioambiente, y se pone en funcionamiento una biblioteca que era frecuentada por estudiantes.

Con los años, el jardín que era la cita de familias y amigos los fines de semana, con su calesita que nunca paraba de girar y su gran fuente de agua, fue cayendo en el olvido.

La inseguridad dentro del predio y en los alrededores de la chacra 223 alejaron a los grupos de adolescentes y a los padres con sus niños, los juegos de la plaza quedaron a merced del vandalismo, lo mismo que las plantas y los edificios. 

Pasaron casi cuatro décadas para que la comuna vuelva a mirar al Botánico. Así, desde el año pasado, con nuevo rango administrativo y una nueva unidad de gestión, se busca poner en valor este parque histórico y a la vez, promover el vínculo con la comunidad.

Como parte del programa de revalorización, se está trabajando en el casco histórico, a corto plazo en la mejora de infraestructura y señalética del predio. En este sentido, se diseñaron tres senderos de baja, mediana y alta dificultad en su recorrido. 

Se colocó cartelería para señalizar el acceso con las reglas y normas de seguridad para garantizar el buen uso del predio. Asimismo, a través de un trabajo llevado a cabo en conjunto con la cátedra de Biología Vegetal de la Facultad de Exactas de la Unam se realizó un relevamiento y señalización de especies nativas y exóticas.

En el mediano plazo está previsto la construcción de un Centro de Visitante y a largo plazo se propone avanzar en un plan de iluminación del lugar y el reordenamiento de los usos del predio, lo que incluye el cerramiento para garantizar el control y seguridad del ingreso y egreso de los visitantes. Así lo explicó a El Territorio Verónica Jakus, coordinadora de la Unidad de Gestión Jardín Botánico, dependiente de la Secretaría de Planificación Estratégica y Territorial.

“La nueva Unidad de Gestión Jardín Botánico se creó en mayo de 2018 y fue por una decisión política del Intendente de jerarquizar el espacio”, sostuvo.

El lugar se funda por una iniciativa de la Asociación Jardín Botánico con la finalidad de preservar y conservar el lugar y su naturaleza. “Con el paso del tiempo y a través de las distintas gestiones municipales el manejo del espacio fue variando; desde 1981 hasta que se crea la unidad coordinadora, el predio era una división dentro de la Dirección de Espacios Verdes; en ese contexto se administraba como un parque público y desde distintas áreas se desarrollaban actividades pero que no abordaban en su totalidad las áreas propias de un botánico”, precisó. 

Y argumentó, en cuanto al mantenimiento de infraestructura y sostenimiento de la biodiversidad: “Creo que desde la década del 80que no se hacía un trabajo estructural de puesta en valor, entonces con la jerarquización del botánico se pone en marcha un sistema de trabajo específico”.

Se trata de un programa integral que promueve, entre otras cosas, la firma de convenios de colaboración. En este sentido, el año pasado se firmó un convenio de cooperación científico académico con la Universidad Nacional de Misiones, específicamente con las facultades de Ciencias Exactas y Forestales de Eldorado. Y para llevar a cabo ese convenio se formó un Concejo Asesor integrado por docentes de la Unam, cuya representante es Ana Honfi, y ejecutivos de la Municipalidad.
“El trabajo tiene tres ejes: conservación, investigación y educación ambiental. Esto surge a partir de la necesidad de gestionar las 19 hectáreas transferidas por la Entidad Binacional Yacyretá que tienen por finalidad el desarrollo de un Centro de Investigación, la puesta en marcha de un Invernáculo y la forestación del nuevo predio. Con esto, el Jardín Botánico queda conformado por 30 hectáreas”. 

El paseo
El casco histórico del Botánico, compuesto del espacio original, conserva la fuente de agua del ingreso, los edificios de guardia, dependencia administrativa, los sanitarios y el playón. 

Crecen en esas ricas tierras 308 especies de las cuales algunas son monumento natural protegido como el palo rosa. Se Puede observar especies representativas de Misiones. El parque alberga 72% de flora autóctona y 28% de especies ornamentales exóticas.

“La idea es avanzar en el trabajo articulado con la Universidad y con otros organismos y también en la vinculación con la comunidad, para que los posadeños podamos apropiarnos nuevamente de este espacio y que vuelva a ocupar el lugar que ocupó para las generaciones anteriores, para ello tenemos que garantizar la seguridad y en este sentido se está trabajando de manera articulada con el apoyo de la Policía y apuntar a un proyecto de iluminación y cerramiento”, comentó Jakus.
Además, para las hectáreas anexadas luego de los trabajos costeros de Yacyretá, hay un proyecto de reforestación con especies autóctonas, representando a las distintas ecorregiones de la provincia.

Por último la coordinadora resaltó: “Hay dos herramientas claves para garantizar la sostenibilidad de un Jardín Botánico y estamos trabajando en ello, una es el Proyecto de Ley de Jardines Botánicos, la otra es el Plan de Manejo y el Plan Anual Operativo”.