Informe de Domingo: Medicamentos desde la fábrica

domingo 24 de marzo de 2019 | 6:00hs.
Informe de Domingo: Medicamentos desde la fábrica
Informe de Domingo: Medicamentos desde la fábrica
Griselda Acuña

Por Griselda Acuña interior@elterritorio.com.ar

La dura situación económica del país golpea cada vez con más fuerza, hasta el punto que atenta contra la calidad de vida de la población. La salud está en riesgo. El incremento del precio de los medicamentos, que en algunos casos fue del 500% en tres años, convierte a un bien social en un producto inaccesible.
Aquellos que ya no pueden comprar su remedio buscan soluciones en el sector público. Los hospitales y los Centros de Atención Primaria de la Salud (Caps) representan la primera opción, atrás quedaron las farmacias. Las cifras respaldan la realidad: en el último año aumentó un 60% la demanda de medicamentos en los Caps de la provincia.
En ese contexto y más que nunca, la gratuidad amerita reivindicación. La gratuidad es política de Estado, es sinónimo de accesibilidad. Misiones cuenta con el Laboratorio de Especialidades Medicinales (Lemis), que produce medicamentos para 53 patologías, los cuales una vez que pasan los controles de calidad son distribuidos en los diferentes centros asistenciales. Gratis. Los ciudadanos no abonan ni deben abonar un peso por el producto solicitado.
¿Cómo se elaboran?¿Cómo trabaja la fábrica?¿En cuánto tiempo se produce?¿Cuántos lotes fabrican cada año? El Territorio visitó el laboratorio ubicado en el predio del Hospital Pedro Baliña, por avenida Quaranta, un lugar que en la actualidad ostenta muchísimo valor, sobre todo para personas de escasos recursos económicos. Desde estas líneas se abordará el proceso: desde que llega el insumo hasta el empaquetamiento de la fórmula que saldrá a la calle.
El Lemis desarrolla sus actividades en el marco del Programa Provincial de Elaboración de Medicamentos, dependiente de la Subsecretaría de Prevención de Adicciones y Control de Drogas, a través de la Dirección de Farmacia, del Ministerio de Salud de la provincia. El año pasado elaboró, para su entrega gratuita, 815.000 unidades de 53 especialidades medicinales; esto se traduce en un valor de 55 millones de pesos, a juzgar por los costos actuales.
“De esta manera se colabora en la eficiencia del gasto público en medicamentos, cooperando con la sostenibilidad del sistema de salud y con el desarrollo del bienestar de la sociedad en su conjunto”, señala en su informe anual 2018, Mercedes Stein, especialista en Industrias Bioquímico-Farmacéuticas y directora técnica del  Lemis. Además de la producción, se destaca la imperiosa necesidad de incorporar recurso humano y efectuar inversiones en mejoras de infraestructura para asumir los retos de los próximos años.
Y como lo económico atraviesa la vida, hay otra arista que merece un abordaje. Aparte de recurrir al sector público, de qué otras estrategias se vale la gente para mantener su calidad de vida.
“La gente dejó de comprar medicamentos y pasó a los genéricos; los pacientes me piden que anote el nombre de la droga en la prescripción, ya que esos salen menos de la mitad”, dijo Fernanda Torres, presidenta de la Asociación de Médicos de Misiones (Ammi). a lo cual sentenció que si no prosiguen el tratamiento, “a largo plazo, llevará a un problema mucho mayor que dejaría que esos pacientes queden expuestos a tener un ACV o infarto”.
“Estamos en una meseta, para hacer un salto cuantitativo en la producción necesitamos mayor inversión en infraestructura e incremento del recurso humano. Cuando hay demanda de un producto específico, se aboca a trabajar ese producto, pero no se pueden aumentar todas las líneas porque estamos limitados por esas dos cuestiones”, señaló Stein.
El planteo de mayor inversión reviste importancia cuando se visualiza el drama. La comunidad sufre, sobre todo la tercera edad y aquellos pacientes con enfermedades crónicas. Para algunas familias, contar con un medicamento es un callejón sin salida. Esas historias, esa realidad, también forman parte de estas páginas. 

Inicios del Lemis

El actual Laboratorio de Especialidades Medicinales fue creado dentro de la estructura administrativa denominada Departamento de Elaboración de Medicamentos e Insumos, en 1991. En los objetivos de su creación se resaltó la necesidad de mejorar la capacidad adquisitiva de medicamentos por el ministerio y facilitar así la accesibilidad para los pacientes más carenciados. En la primera etapa de funcionamiento del Departamento de Elaboración y Fraccionamiento de Insumos, las actividades productivas se ejecutaban en un espacio físico alquilado por el Ministerio de Salud Pública sobre la avenida Santa Catalina. Las actividades se desarrollaron en ese ámbito desde 1992 y hasta junio de 1997. La infraestructura era bastante deficiente. El edificio en el que funciona actualmente fue diseñado sobre una estructura edilicia preexistente y se proyectaron en el tiempo remodelaciones que condujeron al presente estado de la planta, en cuatro etapas. En 2006 se amplía la habilitación al Rubro Medicamentos Fitoterápicos. Para ello fue necesario incorporar alguna tecnología más en el área de Control de Calidad. Estas inversiones se hicieron a través de la financiación de un proyecto por la Cooperación Italiana. Entre 2004 y 2007 hubo inversiones menores en equipamiento, financiadas por la Cooperación Italiana en el marco del proyecto de fitomedicamentos.