G20 negociaciones clave
domingo 18 de noviembre de 2018 | 5:00hs.
G20 negociaciones clave
El Grupo de los 20 (G20) es un foro que aglutina a las mayores economías del mundo. Fue concebido en 1999 en una reunión de funcionarios del Grupo de los 7 (G7), en las que se decidió crear una entidad que tuviera una perspectivas más amplia de los desafíos económicos y financieros globales.
Entre 1999 y 2008, la historia del G20 era la de un foro de expertos técnicos. A partir de la crisis del 2008, el grupo se consolidó como una entidad de reunión e intercambio entre los líderes de los países miembro.
Ahora el G20 es el principal foro internacional para la cooperación económica, financiera y política; se reúne anualmente en uno de los países que lo integran.
La cumbre convoca a los principales líderes políticos y económicos de los países que integran el grupo: presidentes, primeros ministros, funcionarios de economías y finanzas, directores de bancos centrales.
Ahora la anfitriona será la Ciudad de Buenos Aires el 30 de noviembre y el 1 de diciembre. La Argentina fue sede durante todo el año de las reuniones más importantes que estuvieron en la agenda de la cumbre. El objetivo final es alcanzar un documento final con foco en el desarrollo equitativo y sostenible.
Las funciones
El G20 aborda los grandes desafíos globales y busca generar políticas públicas que los resuelvan más allá de las fronteras nacionales.
En conjunto, sus miembros representan el 85 por ciento del producto bruto global, dos tercios de la población mundial y el 75 por ciento del comercio internacional.
Los debates de que suceden durante la cumbre se ven enriquecidos por la participación de las organizaciones internacionales, países invitados y los grupos de afinidad, que representan a distintos sectores de la sociedad civil.
Los temas
Dentro de la agenda de la cumbre, se dará prioridad a los temas propuestos por la Argentina. Estos son el futuro del trabajo, infraestructura para el desarrollo y el futuro alimentario. Por otra parte, se vienen desarrollando más de 45 reuniones en varios niveles gubernamentales y áreas en once ciudades diferentes en todo el país.
La Argentina confía en que los presidentes que se reúnen a finales de este mes en Buenos Aires llegarán a “consensos básicos” en un amplio abanico de temas, aunque, por las “tensiones” actuales, advierte dificultades en el aspecto comercial y el cambio climático, aseguró días pasados el negociador jefe del país o sherpa, Pedro Villagra.
“El cuerpo de cosas donde creemos que va a ser relativamente fácil llegar a acuerdos es grande. Más de un 80 o 90 por ciento en cuanto a número”, resaltó en Buenos Aires el sherpa del país que preside el G20 en 2018.
Sin embargo, como ya ocurrió en la anterior cumbre, en Alemania en 2017, la primera con Trump como presidente norteamericano, dos asuntos seguirán siendo a priori los principales escollos del próximo debate: el libre comercio (con espinosos asuntos como el exceso de capacidad de producción de acero) y la lucha contra el cambio climático. “Ahí tenemos dificultades y grandes”, asumió Villagra, diplomático y con dilatada experiencia en las relaciones internacionales.
Reconoció que, pese a las “tensiones” en negociaciones de este tipo, también hay “muchos puntos de contacto”. Respecto al clima, es optimista y pone como ejemplo que en Estados Unidos, que por decisión de Trump salió del Acuerdo de París, hay zonas donde se están haciendo reducciones de emisiones contaminantes muy superiores a las de naciones que se presuponen más comprometidas.
También está por verse la postura que adopta el mandatario estadounidense, cuya política proteccionista de imposición de aranceles le ha generado roces con potencias como China, acerca del sistema multilateral de comercio, que defienden los principales países del grupo, integrado por las 20 mayores economías desarrolladas y emergentes.
“Estamos convencidos de que debe haber alguna mención general al multilateralismo basado en reglas y no solamente para el comercio. Es algo que tenemos que aceptar que es útil”, destacó Villagra.
El diplomático recordó que en algunas reuniones de ministros que acogió este año el país ya se consensuaron documentos que aplaudían ese sistema global.
Una de las principales labores del máximo responsable negociador es coordinar la elaboración del documento que llegará a los jefes de Estado y de Gobierno durante la cumbre, para que puedan debatirlo y, eventualmente, aprobarlo.
“Una de las cosas que dijimos de entrada es que el documento de líderes sea corto, con lenguaje accesible para todo el mundo y que iban a ir solo los temas más importantes que se fuesen acordando durante el año en los distintos grupos de trabajo y ministeriales”, argumentó el especialista.
Ahora, a menos de dos semanas de la cumbre, se perfilan detalles y no hay un borrador definitivo.
“La declaración que se apruebe tiene que ser una declaración que los líderes puedan leer. Una declaración de 50 o 60 páginas no es realista”, reconoció.
Y es que cualquier idea es bienvenida para lograr que Trump y los mandatarios de China, Xi Jinping; Rusia, Vladimir Putin; Alemania, Angela Merkel; Francia, Emmanuel Macron, o el Reino Unido, Theresa May, se pongan de acuerdo porque, para la anfitriona argentina, la reunión será exitosa si consigue un documento “razonable con consensos básicos”.
“El papel que le toca a la Argentina es tratar, por todos los medios posibles, de acercar posiciones. Si no se logra, no va a ser por no haberlo intentado”, enfatizó Villagra.
No hay que olvidar que el G20 no elabora documentos obligatorios, por lo que depende del compromiso de cada país llevarlos adelante.
“Los líderes pueden decir encontrar algo en común. Para eso hace falta voluntad política. Si la voluntad política es diverger, obviamente la situación no va a ser fácil”, reconoció el sherpa.
“El G20 está para encontrar acuerdos que permitan superar crisis. En este momento, en la situación que estamos con estas tensiones, no podemos decir que no hay una crisis”, añadió Villagra.
La cita de Buenos Aires, la primera presidencial del G20 en Sudamérica, llega en un momento particular para sus miembros, con una Merkel que ya anunció que no optará a la reelección, el ultraderechista brasileño Jair Bolsonaro a punto de asumir en Brasil o un Emmanuel Macron hundido en las encuestas galas.
Conformación e invitados
El grupo está integrado por 19 países y la Unión Europea. Los 19 países del G20 son: Alemania, Arabia Saudita, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, Estados Unidos, Francia, India, Indonesia, Italia, Japón, México, Rusia, Reino Unido, Sudáfrica y Turquía.
Para decidir quiénes serían invitados al G20, originalmente se tuvieron en cuenta variables como el PBI, la población y el comercio mundial. Así, la Argentina quedó incluida y España no, aunque ahora es un invitado permanente de las reuniones.
Como en 2018 la Argentina es el país anfitrión y preside el foro, eligió a dos invitados: Chile y Holanda.
Los países que presiden organizaciones regionales como la Unión Africana, la Nueva Alianza para el Desarrollo de África y la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático son invitados regulares del foro.
Este año, estos grupos regionales están representados por Ruanda, Senegal y Singapur, respectivamente. La Comunidad del Caribe (Caricom) también fue invitada por la Argentina y está representada por Jamaica.
En total, se esperan 7.000 personas, entre ellas presidentes, ministros, funcionarios políticos y cerca de 2.500 periodistas. La cumbre estará presidida por Mauricio Macri.
Aunque aún no están todos confirmados, en el sitio oficial de la cumbre se anuncia la presencia de las siguientes autoridades: Enrique Peña Nieto (presidente de México) Mark Rutte (primer ministro de los Países Bajos, invitado por Argentina), Vladimir Putin (presidente de Rusia), Paul Kagame (presidente de Ruanda, en representación de la Unión Africana), Salmán bin Abdulaziz (rey de Arabia Saudita), Macky Sall (presidente de Senegal, en representación de Nepad), Lee Hsien Loong (primer ministro de Singapur, en representación de Asean), Cyril Ramaphosa (presidente de Sudáfrica), Pedro Sánchez (titular del gobierno de España; invitado permanente), Recep Tayyip Erdogan (actual mandatario turco).
También vendrán al país Theresa May (primera ministra del Reino Unido), Donald Trump (titular del Poder Ejecutivo de los Estados Unidos), Angela Merkel (canciller alemana), Giuseppe Conte (primer ministro de Italia), Joko Widodo (presidente de Indonesia), Narendra Modi (primer ministro de la India), Emmanuel Macron (presidente de Francia), Donald Tusk (titular del Consejo Europeo), Jean-Claude Juncker (presidente de la Comisión Europea), Xi Jinping (presidente chino), Shinzo Abe (primer ministro de Japón), Andrew Holness (primer ministro de Jamaica, en representación de Caricom), Sebastián Piñera (presidente de Chile, invitado por la Argentina), Justin Trudeau (primer ministro de Canadá), Michel Temer (presidente de Brasil) y Scott Morrison (primer ministro de Australia).
En ese marco, en las últimas horas llevaron la calificación de “muy probable” a tan solo “probable”, disminuyendo así el alerta de riesgo.
La novedad llegó a través de un comunicado de prensa difundido por el Ministerio de Seguridad que conduce Patricia Bullrich
Desde la cartera indicaron que las autoridades del Reino Unido “bajaron el riesgo de alerta terrorista” en vistas de la Cumbre de líderes que se desarrollará entre el 30 de noviembre y el 1º de diciembre próximos en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Por otra parte, desde Seguridad indicaron que las autoridades trabajan “de forma coordinada con todas las agencias del Estado para fortalecer los controles y garantizar la tranquilidad durante la Cumbre del G20”, que albergará a los principales líderes del mundo.
Lo cierto es que el alerta emitido hace unos días por el Reino Unido había causado un leve roce entre Londres y Buenos Aires. Hace tan sólo una semana el Foreing Office británico advirtió a los ciudadanos de su país que “los terroristas posiblemente traten de ocasionar ataques en Argentina” con motivo del evento que reunirá a los máximo líderes mundiales.
En ese informe, la oficina exterior del Reino Unido había indicado que “desde 2004 hubo una serie de ataques con pequeños explosivos” en Buenos Aires y otras provincias a manos de grupos antiglobalización.
Sin embargo, la propia Bullrich salió a aclarar que “no hay razones” para pensar en la posibilidad de que puedan registrarse atentados durante la cumbre del G20 en Buenos Aires al tiempo que comentó que “hace más de un año que nos estamos preparando para el evento”.
Entre 1999 y 2008, la historia del G20 era la de un foro de expertos técnicos. A partir de la crisis del 2008, el grupo se consolidó como una entidad de reunión e intercambio entre los líderes de los países miembro.
Ahora el G20 es el principal foro internacional para la cooperación económica, financiera y política; se reúne anualmente en uno de los países que lo integran.
La cumbre convoca a los principales líderes políticos y económicos de los países que integran el grupo: presidentes, primeros ministros, funcionarios de economías y finanzas, directores de bancos centrales.
Ahora la anfitriona será la Ciudad de Buenos Aires el 30 de noviembre y el 1 de diciembre. La Argentina fue sede durante todo el año de las reuniones más importantes que estuvieron en la agenda de la cumbre. El objetivo final es alcanzar un documento final con foco en el desarrollo equitativo y sostenible.
Las funciones
El G20 aborda los grandes desafíos globales y busca generar políticas públicas que los resuelvan más allá de las fronteras nacionales.
En conjunto, sus miembros representan el 85 por ciento del producto bruto global, dos tercios de la población mundial y el 75 por ciento del comercio internacional.
Los debates de que suceden durante la cumbre se ven enriquecidos por la participación de las organizaciones internacionales, países invitados y los grupos de afinidad, que representan a distintos sectores de la sociedad civil.
Los temas
Dentro de la agenda de la cumbre, se dará prioridad a los temas propuestos por la Argentina. Estos son el futuro del trabajo, infraestructura para el desarrollo y el futuro alimentario. Por otra parte, se vienen desarrollando más de 45 reuniones en varios niveles gubernamentales y áreas en once ciudades diferentes en todo el país.
La Argentina confía en que los presidentes que se reúnen a finales de este mes en Buenos Aires llegarán a “consensos básicos” en un amplio abanico de temas, aunque, por las “tensiones” actuales, advierte dificultades en el aspecto comercial y el cambio climático, aseguró días pasados el negociador jefe del país o sherpa, Pedro Villagra.
“El cuerpo de cosas donde creemos que va a ser relativamente fácil llegar a acuerdos es grande. Más de un 80 o 90 por ciento en cuanto a número”, resaltó en Buenos Aires el sherpa del país que preside el G20 en 2018.
Sin embargo, como ya ocurrió en la anterior cumbre, en Alemania en 2017, la primera con Trump como presidente norteamericano, dos asuntos seguirán siendo a priori los principales escollos del próximo debate: el libre comercio (con espinosos asuntos como el exceso de capacidad de producción de acero) y la lucha contra el cambio climático. “Ahí tenemos dificultades y grandes”, asumió Villagra, diplomático y con dilatada experiencia en las relaciones internacionales.
Reconoció que, pese a las “tensiones” en negociaciones de este tipo, también hay “muchos puntos de contacto”. Respecto al clima, es optimista y pone como ejemplo que en Estados Unidos, que por decisión de Trump salió del Acuerdo de París, hay zonas donde se están haciendo reducciones de emisiones contaminantes muy superiores a las de naciones que se presuponen más comprometidas.
También está por verse la postura que adopta el mandatario estadounidense, cuya política proteccionista de imposición de aranceles le ha generado roces con potencias como China, acerca del sistema multilateral de comercio, que defienden los principales países del grupo, integrado por las 20 mayores economías desarrolladas y emergentes.
“Estamos convencidos de que debe haber alguna mención general al multilateralismo basado en reglas y no solamente para el comercio. Es algo que tenemos que aceptar que es útil”, destacó Villagra.
El diplomático recordó que en algunas reuniones de ministros que acogió este año el país ya se consensuaron documentos que aplaudían ese sistema global.
Una de las principales labores del máximo responsable negociador es coordinar la elaboración del documento que llegará a los jefes de Estado y de Gobierno durante la cumbre, para que puedan debatirlo y, eventualmente, aprobarlo.
“Una de las cosas que dijimos de entrada es que el documento de líderes sea corto, con lenguaje accesible para todo el mundo y que iban a ir solo los temas más importantes que se fuesen acordando durante el año en los distintos grupos de trabajo y ministeriales”, argumentó el especialista.
Ahora, a menos de dos semanas de la cumbre, se perfilan detalles y no hay un borrador definitivo.
“La declaración que se apruebe tiene que ser una declaración que los líderes puedan leer. Una declaración de 50 o 60 páginas no es realista”, reconoció.
Y es que cualquier idea es bienvenida para lograr que Trump y los mandatarios de China, Xi Jinping; Rusia, Vladimir Putin; Alemania, Angela Merkel; Francia, Emmanuel Macron, o el Reino Unido, Theresa May, se pongan de acuerdo porque, para la anfitriona argentina, la reunión será exitosa si consigue un documento “razonable con consensos básicos”.
“El papel que le toca a la Argentina es tratar, por todos los medios posibles, de acercar posiciones. Si no se logra, no va a ser por no haberlo intentado”, enfatizó Villagra.
No hay que olvidar que el G20 no elabora documentos obligatorios, por lo que depende del compromiso de cada país llevarlos adelante.
“Los líderes pueden decir encontrar algo en común. Para eso hace falta voluntad política. Si la voluntad política es diverger, obviamente la situación no va a ser fácil”, reconoció el sherpa.
“El G20 está para encontrar acuerdos que permitan superar crisis. En este momento, en la situación que estamos con estas tensiones, no podemos decir que no hay una crisis”, añadió Villagra.
La cita de Buenos Aires, la primera presidencial del G20 en Sudamérica, llega en un momento particular para sus miembros, con una Merkel que ya anunció que no optará a la reelección, el ultraderechista brasileño Jair Bolsonaro a punto de asumir en Brasil o un Emmanuel Macron hundido en las encuestas galas.
Conformación e invitados
El grupo está integrado por 19 países y la Unión Europea. Los 19 países del G20 son: Alemania, Arabia Saudita, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, Estados Unidos, Francia, India, Indonesia, Italia, Japón, México, Rusia, Reino Unido, Sudáfrica y Turquía.
Para decidir quiénes serían invitados al G20, originalmente se tuvieron en cuenta variables como el PBI, la población y el comercio mundial. Así, la Argentina quedó incluida y España no, aunque ahora es un invitado permanente de las reuniones.
Como en 2018 la Argentina es el país anfitrión y preside el foro, eligió a dos invitados: Chile y Holanda.
Los países que presiden organizaciones regionales como la Unión Africana, la Nueva Alianza para el Desarrollo de África y la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático son invitados regulares del foro.
Este año, estos grupos regionales están representados por Ruanda, Senegal y Singapur, respectivamente. La Comunidad del Caribe (Caricom) también fue invitada por la Argentina y está representada por Jamaica.
En total, se esperan 7.000 personas, entre ellas presidentes, ministros, funcionarios políticos y cerca de 2.500 periodistas. La cumbre estará presidida por Mauricio Macri.
Aunque aún no están todos confirmados, en el sitio oficial de la cumbre se anuncia la presencia de las siguientes autoridades: Enrique Peña Nieto (presidente de México) Mark Rutte (primer ministro de los Países Bajos, invitado por Argentina), Vladimir Putin (presidente de Rusia), Paul Kagame (presidente de Ruanda, en representación de la Unión Africana), Salmán bin Abdulaziz (rey de Arabia Saudita), Macky Sall (presidente de Senegal, en representación de Nepad), Lee Hsien Loong (primer ministro de Singapur, en representación de Asean), Cyril Ramaphosa (presidente de Sudáfrica), Pedro Sánchez (titular del gobierno de España; invitado permanente), Recep Tayyip Erdogan (actual mandatario turco).
También vendrán al país Theresa May (primera ministra del Reino Unido), Donald Trump (titular del Poder Ejecutivo de los Estados Unidos), Angela Merkel (canciller alemana), Giuseppe Conte (primer ministro de Italia), Joko Widodo (presidente de Indonesia), Narendra Modi (primer ministro de la India), Emmanuel Macron (presidente de Francia), Donald Tusk (titular del Consejo Europeo), Jean-Claude Juncker (presidente de la Comisión Europea), Xi Jinping (presidente chino), Shinzo Abe (primer ministro de Japón), Andrew Holness (primer ministro de Jamaica, en representación de Caricom), Sebastián Piñera (presidente de Chile, invitado por la Argentina), Justin Trudeau (primer ministro de Canadá), Michel Temer (presidente de Brasil) y Scott Morrison (primer ministro de Australia).
Autorizan a derribar aviones sospechosos
A dos semanas del inicio de la cumbre de líderes del G20 en la Argentina, el Gobierno dio los primeros pasos de lo que será un verdadero operativo de blindaje en la ciudad para esos días. En ese contexto, Mauricio Macri firmó el decreto en donde se actualizó el protocolo de acción en materia de seguridad aeroespacial, uno de los temas más sensibles en este tipo de eventos que reúne a una gran cantidad de líderes mundiales. De acuerdo al DNU 1.054/2018 publicado el viernes, se optimizaron las reglas del protocolo “con el fin de combatir el Tránsito Aéreo Irregular y para defender la soberanía aeroespacial. Así, el Gobierno autorizó el derribo de aviones sospechosos durante el evento. Lo previo se justificó “a fin de combatir el crimen organizado, erradicar los vuelos irregulares, afianzar los controles en la frontera aeroespacial y optimizar la protección aeroespacial”. En las consideraciones sobre las reglas de la protección del espacio aeroespacial, el texto establece que el Ministerio de Defensa contará con las facultades para derribar una aeronave que posea “suficiente entidad para perturbar, poner en riesgo o causar un daño”. Para habilitar el derribo de una aeronave, el Poder Ejecutivo estableció nueve puntos entre los que se encuentran los vuelos por debajo del mínimo de altitud, en forma errática, realiza maniobras agresivas o inicias acciones para utilizar armas de fuego. El operativo de seguridad de la cumbre contará con más de veinte mil efectivos. El Comité de Seguridad del G20 reúne a las cuatro fuerzas de Seguridad federales: Policía, Gendarmería, Prefectura y el Ejército. Además llegaron al país cuatro vehículos blindados y 30 motos de alta cilindrada, donados por China a la Argentina. Entre los elementos entregados están escáneres antiexplosivos, como parte de una donación valuada en unos 17,5 millones de dólares.
Bajan advertencia sobre posibles ataques terroristas
El Reino Unido decidió rebajar la advertencia de riesgo de ataques terroristas en la Argentina. Se trata del denominado Travel Advice, un indicador que se produce en Londres con el objeto de informar a los ciudadanos británicos acerca de la situación en diferentes países.En ese marco, en las últimas horas llevaron la calificación de “muy probable” a tan solo “probable”, disminuyendo así el alerta de riesgo.
La novedad llegó a través de un comunicado de prensa difundido por el Ministerio de Seguridad que conduce Patricia Bullrich
Desde la cartera indicaron que las autoridades del Reino Unido “bajaron el riesgo de alerta terrorista” en vistas de la Cumbre de líderes que se desarrollará entre el 30 de noviembre y el 1º de diciembre próximos en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Por otra parte, desde Seguridad indicaron que las autoridades trabajan “de forma coordinada con todas las agencias del Estado para fortalecer los controles y garantizar la tranquilidad durante la Cumbre del G20”, que albergará a los principales líderes del mundo.
Lo cierto es que el alerta emitido hace unos días por el Reino Unido había causado un leve roce entre Londres y Buenos Aires. Hace tan sólo una semana el Foreing Office británico advirtió a los ciudadanos de su país que “los terroristas posiblemente traten de ocasionar ataques en Argentina” con motivo del evento que reunirá a los máximo líderes mundiales.
En ese informe, la oficina exterior del Reino Unido había indicado que “desde 2004 hubo una serie de ataques con pequeños explosivos” en Buenos Aires y otras provincias a manos de grupos antiglobalización.
Sin embargo, la propia Bullrich salió a aclarar que “no hay razones” para pensar en la posibilidad de que puedan registrarse atentados durante la cumbre del G20 en Buenos Aires al tiempo que comentó que “hace más de un año que nos estamos preparando para el evento”.
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