Falleció piloto que volaba al ras del suelo y chocó con avioneta en tierra

lunes 05 de octubre de 2020 | 5:00hs.
Falleció piloto que volaba al ras del suelo y chocó con avioneta en tierra
Falleció piloto que volaba al ras del suelo y chocó con avioneta en tierra
Carlos Cardozo

Por Carlos Manuel Cardozo fojacero@elterritorio.com.ar

Un hombre falleció ayer y su hijo se encontraba en grave estado al cierre de esta edición, luego de que una avioneta en la que viajaban se precipitara en Garupá. La víctima fue identificada como Rosalino Rubén Rigo, de 47 años, mientras que su hijo se llama Mariano Rigo, de 19 años.

Rigo era comerciante, oriundo de Panambí, pero instalado desde hace muchos años en Posadas, donde formó su vida. “Vino a estudiar y no se fue más”, describió ayer un familiar directo. Estaba casado, y además de Mariano dejó a una hija adolescente. Se trataba de un piloto experimentado, vicepresidente del Aeroclub San Cristóbal de Posadas.

Según pudo reconstruir este medio en base a diversas fuentes consultadas, el siniestro ocurrió pasadas las 18 en el lote 24A de Garupá, conocido como el campo Bonetti, en Parada Leis. El lugar tiene una pista de aviones y también se registró un accidente de un ultraliviano en 2005, en donde fallecieron dos personas.

Ayer investigadores policiales y judiciales señalaron que la principal hipótesis es que se trató de un error humano y prueba contundente de ello son dos videos que trascendieron a la opinión pública. De todas formas, en la jornada de hoy especialistas realizarán diversas pericias para establecer con rigor científico la secuencia.

En los registros, a los que tuvo acceso El Territorio, se ve cómo la avioneta experimental Sonex que manejaba Rigo pasa a muy pocos metros del suelo, casi embiste a unas cinco personas que estaban en el lugar y termina chocando contra otra aeronave que estaba estacionada allí.

Las fuentes expresaron que luego de eso siguió unos metros hasta que impactó en el piso y rebotó, para terminar unos 300 metros lejos de la pista. La avioneta quedó totalmente destruida y Rosalino Rubén falleció en el acto. Su hijo, en tanto, fue trasladado al  hospital Madariaga, donde ayer hacían vigilia sus familiares.

Tenía varias fracturas y hasta anoche se encontraba estable. Fue trasladado al centro médico en una ambulancia de la Red de Traslados de Misiones, aunque al lugar llegó un enfermero en el helicóptero de Salud Pública. Se esperaba anoche un nuevo parte médico.

Según pudo reconstruir este medio, la avioneta LV-X628 con los dos tripulantes salió del aeropuerto local a las 17 y pasó por el campo Bonetti. Al parecer el piloto no quería aterrizar ahí, sino que hizo “una pasada” volando al ras de piso.

Los trabajos en el lugar
El Territorio fue el único medio que estuvo ayer en el lugar de los hechos. Se trata de un campo privado, con plantaciones de yerba a unos cuatro kilómetros de la ruta provincial 105. Le fue muy difícil ubicar e ingresar a todas las comisiones de la Policía de Misiones -intervino la Comisaría Quinta-, Bomberos y autoridades judiciales.

La Policía Científica llegó media hora antes a la escena. La pista no tiene ningún tipo de iluminación, por lo que todos los trabajos se hicieron en la cerrada noche. Los móviles policiales y de Bomberos salieron de la pista en lo que es una especie de potrero, un campo abierto, e iluminaron la aeronave con luces altas.

Fue así que los profesionales pudieron hacer todo el relevamiento de la escena, para luego recién extraer el cuerpo, que fue llevado a la Morgue Judicial. Todo fue supervisado por el juez Marcelo Cardozo, titular del Juzgado de Instrucción Uno de Posadas, de turno y con jurisdicción en la zona.

Según adelantaron los encargados del operativo a este medio, en la jornada de hoy, con la luz del día, se harán todas las demás pericias. También se va a peritar la aeronave con la que impactó, que anoche estaba guardada en uno de los tres hangares que hay en el campo, muy cerca del siniestro.

Se montó una guardia en el lugar, para que nada en el escenario sea modificado.

También realizarán un informe especialistas de la Administración Nacional de Aviación Civil (Anac), dependiente del Ministerio de Transporte de la Nación, que anoche se hicieron presentes en el lugar. También investigará la sede de Resistencia -Chaco- de la Junta de Seguridad de Transporte, creada este año y que absorbió a la Justa de Investigación de Accidentes de Aviación Civil (Jiaac). 

Ayer especialistas consultados dijeron que el avión es denominado experimental, debido a que no es una aeronave construida en serie, como lo son aquellas mayormente conocidas. Sin embargo, se trata de una avionetas que cumplen con todas las condiciones de seguridad para salir a los cielos.

La muerte de Zoilo y Doedderer, el antecedente

En el mismo lugar donde ocurrió la tragedia ayer se estrelló el ultraliviano.
El campo Bonetti registra un luctuoso antecedente, en el cual murieron dos personas. A unos pocos metros donde ayer cayó la avioneta LV-X628, dos aviadores perdieron la vida al caerse un ultraliviano estadounidense.

Aquel siniestro ocurrió también un domingo, el 20 de febrero del 2005 y algunos de los bomberos que participaron de los operativos lo recordaron ayer cuando nuevamente llegaron al lugar de los hechos convocados por la tragedia de Rigo.

Incluso cuando aún no se sabían los pormenores del hecho se especuló que el lugar podría tener alguna condición especial que propiciaría a este tipo de siniestros, como un denominado pozo de aire, algo que en verdad no existe. Todo fue descartado luego, más teniendo en cuenta que se practica allí la aviación de forma constante.

Según los archivos de El Territorio, en aquella oportunidad las víctimas fueron identificadas como Juan Martín Zoilo (piloto), de 38 años, y Walter Doedderer, de 24 años. Ambos completaban horas de vuelo para obtener la licencia.

Cerca del mediodía cuando ya casi llegaban al destino programado, en el campo Bonetti en Parada Leis, la avioneta Rans S-12XL se precipitó sobre los yerbales, a unos 20 metros de la casa de la familia Bonetti, y a unos 100 metros de la pista de aterrizaje que dispone la chacra y que ayer fue otra vez el lugar de un terrible acontecimiento.

Dos años antes los Zoilo habían comprado el kit para armar el ultraliviano de la marca Rans.  Tras mucho tiempo de detallados arreglos, lo terminaron de armar justo una semana antes de esa tragedia que conmovió a toda la provincia.

Se trataba de una máquina, con un motor de 100 hp y 460 kilos de peso.

El Rans S-12XL tuvo su primer vuelo de prueba el viernes anterior, en horas de la mañana y fue un éxito.

Ese bautismo tuvo como testigos a dotaciones de bomberos y contó con dispositivo de seguridad por si ocurría alguna contingencia. Nada de eso fue necesario porque la rutina de vuelo se cumplió sin ninguna complicación.

Ese día la primera preocupación de la torre de control del aeropuerto fue a los 30 minutos, ante la falta de comunicación de los tripulantes.

A las 12.12 llamó el padre del piloto e informó a la Policía que el ultraliviano se había estrellado en campo Bonetti. Más tarde, se hicieron presentes las autoridades y rescataron los cuerpos  sin vida de los aviadores.