Es posadeño y ofrece paseos náuticos en el Río de la Plata

martes 03 de diciembre de 2019 | 7:45hs.
Es posadeño y ofrece paseos náuticos en el Río de la Plata
Es posadeño y ofrece paseos náuticos en el Río de la Plata
Victoria Bergunker

Por Victoria Bergunker interior@elterritorio.com.ar

Las empresas familiares siempre tienen esa cuota de calidez que hacen que el visitante se sienta como en casa. Este es el caso de la familia Magnarelli, que hace más de 20 años ofrece paseos náuticos en el Río de la Plata a bordo del Humberto M, aunque los primeros viajes comenzaron en la década del 80 en Tigre y luego siguieron en Puerto Iguazú, Misiones, a principios de los 90.
Descendientes de italianos, los Magnarelli ofrecen actualmente recorridos que comienzan en Puerto Madero y llegan hasta el aeroparque Jorge Newbery, propuesta que rompe con el estereotipo porteño e invita a los tripulantes a visualizar Buenos Aires desde un ángulo impensado que regala postales únicas.
En uno de los servicios al atardecer, El Territorio se adentró en la historia de uno de ellos: Julio César (42), quien nació en Posadas y hoy es el gerente comercial de la empresa. “En el año 1976 mis padres se fueron como concesionarios de la hostería del Automóvil Club Argentino (ACA) de San Ignacio, Misiones, donde permanecieron dos años. En el transcurso nací yo en Posadas”, comenzó relatando en diálogo con este medio mientras la embarcación avanzaba con la puesta del sol.
Al regreso a Buenos Aires -un año después-, su padre mandó a construir el barco que se convertiría en un negocio familiar: el Humberto M, en honor al integrante que llegó desde Italia a principios de 1900 y sentó las bases de una tradicional familia de inmigrantes. 
Los paseos náuticos comenzaron en los 80 y salían desde la ciudad de Tigre, pero la década siguiente el Humberto M conoció Misiones, donde trasladó a miles de pasajeros que optaban por un almuerzo diferente. “En el año 1991 nos fuimos a Puerto Iguazú con el barco, porque a mi padre le quedó como una sensación de que alguna vez tenía que volver a Misiones a trabajar. Así que se dio la posibilidad y hacíamos un paseo en el que ofrecíamos almuerzo con una vista en el marco de las tres fronteras”. 
“Hacíamos el recorrido sobre el río Iguazú hasta el puente Internacional Tancredo Neves, luego regresábamos hasta el punto de las tres fronteras, tomábamos el río Paraná para el lado del Puente la Amistad, cerca de la Isla de Acaray que divide Foz de Iguazú y Ciudad del Este”, detalló Magnarelli.
Allí permanecieron con la propuesta durante cuatro años -hasta 1994- donde Julio realizó casi toda su formación secundaria en la Escuela Normal Superior 8 y donde formó los lazos con la tierra colorada que perduran hasta hoy.
“Tengo muchos amigos en Iguazú, algunos están en el rubro turístico igual que yo, así que nos vemos en muchos eventos, otros que me quedaron del colegio. La amistad siguió con muchos de ellos y cada tanto nos encontramos, y si bien no tengo familiares en Misiones, trato de refugiarme en mis amigos para mantener el lazo con la provincia”, expresó. 

Humberto M
En Puerto Madero, Tigre y Puerto Iguazú, la propuesta siempre estuvo encarada desde la misma perspectiva: ofrecer al tripulante un momento sobre el río acompañado de exquisitos platos y la mejor coctelería. 
Además de los paseos de lunes a sábados que constan de un almuerzo de tres pasos -entrada, plato principal y postre- ofrecen salidas para eventos privados, fiestas, y algunas fechas especiales.
En octubre incluyeron una actividad llena de colores y se trata de un paseo que invita a ver el atardecer con una barra libre de bebidas incluida. “La experiencia dura dos horas, pero de navegación es una. Es un recorrido corto porque lo que buscamos es tener la puesta del sol tanto en la ciudad como en el río”, concluyó Magnarelli. La vista desde el Humberto M es digna de una postal.