En un año, hay más de 2 millones de nuevos pobres en la Argentina

viernes 14 de diciembre de 2018 | 5:00hs.
 La pobreza en la Argentina alcanzó al 33,6% de la población durante el tercer trimestre del año, según la última medición del Observatorio de Deuda Social (Odsa) de la UCA. Con 13.600.000 pobres, se trata de la mayor variación de este índice en el gobierno de Mauricio Macri y de la última década. La cifra supera por lejos la última medición de UCA (28,2%), la cual representa a 11.414.285 personas aproximadamente. Así, la variación significa un aumento de 2.185.715 nuevos pobres.
Los motivos para este índice deben encontrarse en la crisis económica producto de una megadevaluación, la cual derivó en inflación -que terminará el año en torno al 45%-, en la caída del salario real y en la recesión.
 “Si los ingresos reales están bajando y no hay posibilidad de compensarlo con más trabajo y los precios van por arriba de las remuneraciones, la pobreza sube a valores como los actuales”, resumió Agustín Salvia, director del Odsa, durante la presentación del informe.
La medición de la UCA mostró un avance del 28,2% del tercer trimestre de 2017 al 33,6% actual, es decir, una variación en torno al 5,5%. Se trata del mayor registro de la era Macri, sólo asemejable con el 32,3% de 2016 que marcó el anterior pico, producto de la devaluación con la llegada del gobierno de Cambiemos.
Salvo estos dos datos, desde 2010 la pobreza osciló entre el 24 y el 29%, índices igualmente altos que muestran el avance de la pobreza estructural.
En cuanto a la indigencia, los números son otros. Según la Odsa, en el tercer trimestre de 2018, aunque con tendencia al alza, la tasa de indigencia no registró un cambio significativo, ya que se ubicó en el 6,1%, es decir, unas 2.500.000 personas, contra el 5,7% del mismo período de 2017, lo que representa un aumento de unos 200.000 nuevos argentinos indigentes. 
“Hay un colchón de protección social que hace que esto no se agrave en el corto plazo”, advirtió el especialista al referirse a la asistencia social por parte del Estado y a las changas de los sectores más populares.
El trabajo de la UCA también analizó pobreza e indigencia monetaria en base al estrato socioocupacional, regiones urbanas y grupos etarios. Bajo esas variables vieron la luz datos significativos.
Los nuevos pobres pertenecen a la clase media no profesional, que subió del 4,9 al 8,1%, en la clase obrera integrada, que se incrementó al 43,3%, cuando el año pasado era de 35,1%. En cuanto a la indigencia, el sector más afectado fue la clase trabajadora marginal, que pasó de 17,6% a 19,6%.
En cuanto a regiones, el conurbano bonaerense sigue siendo el más perjudicado con 43,3% de la población.
Es decir que en Buenos Aires casi el 45% de las personas viven bajo la línea de pobreza. La indigencia mostró una variación leve de 8,2% a 8,9%.
La pobreza y la indigencia golpean más fuerte a los menores de edad en todo el país ya que el 51,7% de los niños hasta 17 años es pobre y el 10,9% es indigente. Esta es una tendencia que no para de crecer en los últimos años de crisis económica.

De cara a las elecciones

“La tendencia que se detectó a través de la estimaciones de los números oficiales indica que, en este cuarto trimestre, la pobreza seguirá subiendo en nuestro país. Además que en los primeros trimestres del 2019 tenderán a caer los números de la pobreza, como resultado de que las prestaciones sociales y los salarios se actualicen sobre la inflación de esos meses y que se reactive un poco el mercado interno, más en un período electoral”, aseguró el especialista Agustín Salvia, a cargo del análisis efectuado por la UCA. Por otro lado, el observatorio desarrolló una nueva metodología para hacer proyecciones sobre las cifras oficiales, donde combinaron su medición de pobreza e indigencia con la Encuesta Permanente de Hogares del Instituto Nacional de Estadísticas y Censo (Indec), que mide la Canasta Básica Alimentaria y la Canasta Básica Total.