El SENASA confirmó un brote de rabia paresiante en Santa Tecla

miércoles 04 de diciembre de 2019 | 20:23hs.
Santa Tecla, Corrientes
Santa Tecla, Corrientes
El organismo nacional confirmó en las últimas horas, un brote de rabia paresiante en el Paraje Santa Tecla, ubicado en la tercera sección del departamento de Ituzaingó, Corrientes. Luego de un análisis de laboratorio que reveló la presencia de la enfermedad en una vaquillona de la zona, el organismo estableció una serie de medidas sanitarias preventivas.

Una vez confirmado el diagnóstico positivo, el organismo sanitario dispuso la obligatoriedad de vacunar a la totalidad del ganado bovino, porcino, equino y de rumiantes menores, en un radio de 10 kilómetros alrededor del caso afectado, donde existen alrededor de 5.000 cabezas de ganado bovino involucradas.

En los campos que se localicen en este radio, queda prohibida la faena y el consumo de animales hasta que se cumplan con los plazos de la vacunación y revacunación de todas las especies susceptibles. Mientras que los movimientos a invernada podrán realizarse inmediatamente luego de la primera vacuna con previo aviso al destino, donde se completará el esquema de vacunación.

Otra medida del Senasa, adoptada junto con los ministerios de Salud y de Producción de la Provincia de Corrientes, el Municipio de Ituzaingó y la Fundación Correntina para la Sanidad Animal (Fucosa) fue realizar una jornada informativa sobre rabia paresiante a la que concurrieron 30 personas; entre ellas, productores, alumnos de escuelas y público general. Asimismo, la Municipalidad de Ituzaingó vacunó a los caninos y felinos del lugar, además de la fumigación correspondientes.

Cabe recordar que a fines de octubre se registró por primera vez un caso de rabia paresiante en el límite de San Luis con Córdoba, lo que disparó fuertes operativos entre esas provincias que continúan.

Características

La rabia paresiante es una zoonosis, puede transmitirse de los animales a las personas y es mortal, de ahí radica la importancia de la prevención mediante la vacunación de los animales susceptibles de contraer la enfermedad y el control de vampiros.

Los brotes de rabia paresiante perduran no más de 18 meses con periodos ínter epidémicos sin la enfermedad de por los menos 3 o 4 años.

Los primeros síntomas observados en animales consisten en inquietud, falta de apetito, tendencia a aislarse y frecuentes vocalizaciones con un tono de voz diferente al habitual. Luego se observa depresión, deshidratación, con dificultad postural y ambulatoria, y finalmente la muerte.

El Senasa recomienda evitar el contacto con animales muertos o con sintomatología nerviosa y dar aviso inmediato a su oficina más cercana, o a través de la aplicación Notificaciones Senasa disponible en Play Store, teniendo en cuenta que se trata de una enfermedad de denuncia obligatoria.