El riesgo país por las nubes: tocó los 963 puntos, el máximo desde 2014

jueves 25 de abril de 2019 | 5:00hs.
Federico Furiase - Economista consultora EcoGo
Federico Furiase - Economista consultora EcoGo
El indicador de JP Morgan creció ayer 103 puntos. Los operadores indicaron que la incertidumbre va más allá de la posible victoria de Cristina Fernández de Kirchner en las elecciones: al mercado no le convence tampoco el accionar del Gobierno. Tras un arranque alcista, el riesgo país redobló la apuesta y llegó a los 963 puntos en una rueda en la que los operadores no saben cuál podría ser el techo.
No sólo es el registro más alto de la administración de la alianza Cambiemos, con Mauricio Macri a la cabeza. Para encontrar cifras similares hay que remontarse al 19 de febrero de 2014, cuando el riesgo país marcó 986 puntos básicos.
En la plaza porteña creen que la desconfianza del mercado llegó a niveles que antes no se veían: temen no sólo por lo que podría hacer Cristina Kirchner como presidenta, también desestiman la habilidad de un segundo gobierno de Macri para estabilizar la variables económicas.
Ayer el Presidente optó por un mensaje en una radio de Venado Tuerto para calmar los caldeados ánimos bursátiles y a partir de allí todos los funcionarios se encolumnaron detrás de ese discurso.”Ahora está todo cruzado por la elección, el mundo duda que por ahí los argentinos quieren volver atrás y eso da mucho miedo al mundo, aumenta el riesgo país, toman posiciones defensivas, pero yo creo que están equivocados, que los argentinos no van a volver atrás”, dijo.

Miedo a los dos
“Los 900 puntos no significan sólo un temor a que vuelva Cristina; a los de este Gobierno también”, contestó y resumió por su parte Gabriel Holand, director de HR Global consultores financieros.
En los hechos, según Holand, lo que se percibe en el mercado hoy “es la culminación, el fin del carry trade”, ya que “una vez terminada la inversión en pesos, los convierten a dólares y se van, primero los extranjeros y luego los locales”. En sintonía, describió: “Cuando los fondos ya perdieron plata y se tienen que dar vuelta y explicárselo a sus clientes cómo está todo, o qué pasó, dicen ‘ya cortamos la pérdida, fue un mal movimiento’. ¿Cómo harían si no? ¿Les dirían aguanten un poco, ya va a mejorar? No, nada de eso; no hay forma de justificarlo y liquidan la inversión”.
El experto dijo que esto se da “sobre todo porque la incertidumbre es fuerte, no solamente porque el Gobierno podría perder las elecciones,  sino por la situación actual en sí”.  Lo mismo dijeron desde una consultora porteña; su directivo sentenció: “La mejor noticia sería que se baje Macri de la candidatura presidencial. Ahí rebota todo. Disminuiría el riesgo CFK con alguien competitivo”. De todas formas, en la city no lo ven viable, ya que la fuente, en estricto off the record, agregó: “Pero si lo hace tarde y mal, no va a servir. Debería ser ahora. Y no va a pasar”.
Desde Consultatio, Martín Przybylski, portfolio manager, opinó: “El riesgo país superó hoy los 920 puntos, alcanzando un máximo del gobierno de Macri, mientras que el CDS a 5 años (seguro contra default) pasó los 1.000 puntos esta mañana. Los bonos en dólares están cayendo hasta 9%, lo que denota que la deuda argentina se encuentra en este momento sin ningún tipo de sponsor ni local ni internacional que haga sostener los precios”.

Aumenta el costo de colocar deuda a futuro

El riesgo país es un indicador elaborado por el JP Morgan que mide la diferencia en los rendimientos que pagan los bonos del Tesoro de los Estados Unidos y las del resto de los países, por eso la baja de los precios de los bonos dispara el riesgo país. Cuando terminó el gobierno de Cristina Kirchner, el indicador se ubicaba en los 480 puntos y si bien para fines de 2017 había caído a niveles de 350 unidades, en un año se duplicó: a fin de 2018 registró 732 puntos. Es decir que, en lo que va de 2019, el riesgo país sube más de 100 enteros, o un 17%. En cuanto al avance bajo el gobierno de Macri, es del 78%. Básicamente, el riesgo país es ni más ni menos que el costo “extra” que tienen que pagar el Estado nacional, las provincias o las empresas argentinas si salen a colocar deuda.


El dólar rozando los $45 y presionando precios

Federico Furiase - Economista consultora EcoGo “La depreciación del peso frente a la escalada del riesgo país acelera las expectativas de inflación”
El dólar, en el mercado minorista de los bancos, cerró en  44,97  pesos en promedio, luego de haber quedado el martes en 43,52 pesos, según los datos oficiales del Banco Central. Mientras tanto, en varios bancos privados la cotización de la divisa estadounidense superó los 45 pesos. Así, cerró en 45,2 en el Galicia; 44,64 en el Francés; 45,05 en el ICBC; y 44,9 pesos en el Santander Río y en el Provincia, entre otros. En Posadas, en agencias de cambio el billete cotizó 45 pesos.
Pese a algunos indicios de desaceleración de los precios, sobre todo desde la tercera semana de abril, el récord del valor mayorista del dólar ayer (43,94) volvió a sembrar la duda entre economistas sobre si el trabajo del Banco Central (BCRA) y del Ejecutivo logrará efectos claros antes de las elecciones.
El valor del dólar preocupa especialmente porque amenaza con una aceleración de los precios de alimentos, bienes durables (electrodomésticos, electrónica, autos) y combustibles, que podrían empujar la inflación de abril por encima del 4%, una estimación mayor a la proyectada por el mercado, y le pondría un piso más alto a mayo.
Los alimentos subieron 64% en doce meses, en línea más con el corrimiento del tipo de cambio que con el nivel general de precios.
Pero los alimentos no son el único problema. Una decisión de Estados Unidos sobre Irán que disparó el precio del Brent a su máximo en el año, sumado a la depreciación del peso, le ponen una nueva presión a los combustibles. En las petroleras creen que la nafta debería subir 10%.
En ese sector no existen los precios congelados. Están más bien los “conversados”. Allí, la Secretaría de Energía “dialoga” con el mercado, fundamentalmente con YPF , para referenciar cuáles deberían ser los aumentos.

Presión a los precios
“¿Este aumento del dólar meterá presión a la inflación?”, preguntó La Nación. “Sí, algo de presión mete. Fundamentalmente en alimentos, pero además los corrimientos del tipo de cambio se aprovechan para recuperar márgenes de ganancia”, afirmó la economista de LCG Melisa Sala.
“Impactará algo, pero estamos cerca de fin de mes. Puede pegar en bienes de consumo masivo, como alimentos, y productos de limpieza y tocador”, confirmó Camilo Tiscornia, director de C&T Consultores. El economista Federico Furiase, del estudio EcoGo, señaló que se conformó un “complicado círculo vicioso”, dado que la depreciación del peso frente a escalada de riesgo país acelera las expectativas de inflación y el mercado le exige –por esto- más tasa real al Banco Central.
Asimismo, esto complica ejercicios de sostenibilidad de la deuda pública en dólares con la necesidad paralelo de alcanzar un mayor superávit fiscal primario, lo cual es requerido para mantener ratio deuda sobre PBI. Y, a su vez, esto termina reforzando la presión en el riesgo país.