jueves 28 de marzo de 2024
Algo de nubes 30.7ºc | Posadas

El alud en Río de Janeiro ya dejó 14 muertos y temen nuevos derrumbes

domingo 11 de noviembre de 2018 | 23:30hs.
Según el municipio, la zona de la catástrofe no estaba en peligro, pero finalmente termino cediendo.
Los servicios de rescate han localizado los cuerpos de 4 personas, con lo que ha ascendido a 14 el número de fallecidos por el deslizamiento de tierra ocurrido en el estado brasileño de Río de Janeiro, informó ayer el Cuerpo de Bomberos.

Después de más de 24 horas de búsqueda, fueron localizados los cadáveres de tres mujeres jóvenes y una anciana en el Morro da Boa Esperança, en la ciudad de Niteroi, afectada por las fuertes lluvias caídas en los últimos días en el estado de Río de Janeiro.

Tras el hallazgo de los cuerpos de las cuatro mujeres, los bomberos dieron por finalizadas las labores de búsqueda de supervivientes, aunque continuarán con los trabajos de retirada de escombros, mientras la Defensa Civi mantiene el estado de alerta ante el riesgo de nuevos derrumbes.

Además de los fallecidos, once personas fueron rescatadas con vida y han sido ingresadas en hospitales de la región, entre ellas tres niños, uno herido de gravedad.
El deslizamiento se produjo cuando, tras las intensas lluvias, parte de la cumbre del Morro da Boa Esperança se vino abajo y enterró al menos seis viviendas que estaban habitadas en el momento del siniestro.

Entre los 14 fallecidos figuran tres niños y tres ancianas.

Más de 200 personas, entre bomberos, agentes de la Defensa Civil, asistentes sociales y voluntarios, participaron en los trabajos de rescate, que se extendieron toda la noche.

El acceso a decenas de viviendas ha sido bloqueado por cuestiones de seguridad y se instalado tiendas de campaña y en una escuela cercana se montó una base de apoyo para acoger a los evacuados.

El alcalde de Niteroi, Rodrigo Neves, afirmó que el Morro da Esperança no era considerado una zona de alto riesgo geológico, pero según algunos de los habitantes "todo el mundo sabía que eso iba a pasar".

Así el presidente de la Asociación de Vecinos de la Comunidad de Boa Esperança, Cláudio dos Santos, dijo que una de las casas ya había sido cerrada tiempo atrás por riesgo de derrumbe.

“En ese momento traje a Defensa Civil para aislar la casa, sólo que es difícil con los residentes, no quieren salir. Ayer incluso avisé que estaba preocupado con esa lluvia, pero pasó lo que pasó”, dijo Santos el sábado entrevistado por Globo News.

La alcaldía de Niteroi dijo que desde 2013 invirtió cerca de 40 millones de dólares en obras de contención de pendientes. Sin embargo, otra vez, una tragedia conmueve a la ciudad.

El comandante del cuerpo de Bomberos explicó que, según las informaciones preliminares, no todas las casas estaban ocupadas en el momento del impacto.
Se estima que unas 22 familias resultaron afectadas y otras 17 casas fueron cerradas.

“Aquello ya era una tragedia anunciada porque Defensa Civil sube al cerro y lo cierra pero no arregla una casa, no hace un proyecto, ni ubica a nadie en otro lugar. ¿Dónde va a vivir un pobre?”, cuestionó el sábado Cassia, una residente de 24 años de la comunidad.


Un peligro constante en zona de declives

Las tormentas son habituales durante la primavera y verano brasileños, por lo que, cuando sumadas a los desniveles del terreno geológico del país y a las construcciones irregulares en las cuestas de los montes, suelen producir corrimientos de tierra que, en muchas ocasiones, resultan ser fatales.
En una de las peores catástrofes de ese tipo, en 2010, alrededor de 300 derrumbes en los cerros en Río acabaron con la vida de más de 250 personas, 48 de ellas en el Morro do Bumba, un antiguo vertedero sobre el cual se construyó una favela.
Es frecuente que Defensa Civil de Brasil emita alertas sobre posibles deslizamientos de tierra. A principio de este año en Santa Catarina hubo peligro de deslizamientos en 13 ciudades de ese estado.
Te puede interesar
Ultimas noticias