Desvíos y restricciones en rutas de Corrientes a causa de las inundaciones

viernes 18 de enero de 2019 | 6:00hs.
Son millonarias las pérdidas en los campos de la región del Litoral.
Son millonarias las pérdidas en los campos de la región del Litoral.
Desde la Dirección de Vialidad Nacional se dieron a conocer las interrupciones que hay en las rutas nacionales y provinciales en el territorio correntino como consecuencia directa de las persistentes lluvias e inundaciones.
Hay un corte de tránsito provisorio en la ruta nacional (RN) 12 sobre el kilómetro 715, en el tramo del puente bailey en el arroyo Guazú hasta nuevo aviso. El desvío desde el norte se realiza en Goya por la ruta 12 hacia el este y desde el sur en la ruta provincial (RP) 1 de Entre Ríos. Gendarmería, personal de Vialidad Nacional y de la Policía de Corrientes están en el lugar dirigiendo el operativo.
Además existe una interrupción vehicular por precaución en la zona del puente sobre el río Miriñay en la RN 123 de 20 a 6. Gendarmería custodia el cruce de la RN 123 y la RN 14 evitando que los vehículos ingresen a la RN 123 y la policía en Mercedes RN 123 y RN 119, evitando el ingreso por el otro sector. Se adujo que hasta el momento las estructuras del puente y los aliviaderos no corren peligro, pero se intenta evitar que los conductores despisten y terminen en la zona de banquinas, las cuales están totalmente cubiertas de agua y también hay mucha presencia de animales en la ruta.
Por otro lado, en la RN 12 kilómetro 784 (9 de Julio-Corrientes) continúa el corte. Hay desvíos por RN 123 y RP 27 para retomar en kilómetro 940 hacia Corrientes capital y viceversa hacia rotonda de 9 de Julio. Personal de la concesionaria Caminos del Paraná trabaja para restablecer la alcantarilla ubicada en el lugar.
Además se aconseja circular con precaución y evitar hacerlo de noche en todas las rutas nacionales de Corrientes. Vialidad Nacional está monitoreando cada una de ellas.

Emergencia
En el marco de las inundaciones que afectan a Santa Fe, Santiago del Estero, Chaco, Entre Ríos y Corrientes, desde la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came) se envió una misiva al jefe de Gabinete de la Nación, Marcos Peña, y al ministro de Producción y Trabajo de la Nación, Dante Sica, solicitando la declaración de la emergencia económica y el desastre agropecuario en las provincias damnificadas. “Propusimos que se disponga una ayuda financiera especial para todas las actividades económicas perjudicadas por esta situación climática. Planteamos la posibilidad de que se otorgue una moratoria amplia para los sectores que generan riqueza como el comercial, industrial y productivo. También pedimos que se implemente el Ahora 12 todos los días en las localidades afectadas”.
“Requerimos que las entidades financieras públicas otorguen tasas de redescuento bonificadas para dar alivio financiero y que las privadas no perciban comisiones por los depósitos en efectivo” agregaron desde Came.
Mientras, el titular de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria Limitada (Coninagro), Carlos Iannizzotto, comentó que “las precipitaciones han sido intensas y perjudicaron a nuestros productores. Los años pasan, falta planificación y las obras no se ejecutan. Hoy la falta de infraestructura genera al campo un daño con altos costos. Con la emergencia no alcanza ni es suficiente, aunque es necesario que se aplique lo antes posible. La magnitud del desastre es compleja y esto se agrava aún más porque para ayudar al productor tenemos tasas de interés que están fuera del alcance de la gente, ante su escasa rentabilidad”.
En otro orden, entre todas las zonas afectadas, hay cuatro muertos y los evacuados al momento ascienden a 3.000, según confirmó la Cruz Roja Argentina.


Preocupación entre los empleados

Desde el Registro Nacional de Trabajadores Rurales y Empleadores (Renatre) se expresó preocupación por la grave situación que está atravesando buena parte del Norte de nuestro país, como resultado de las copiosas lluvias y consecuentes inundaciones, que generaron el anegamiento de cientos de miles de hectáreas, dificultando la actividad productiva y afectando a miles de familias rurales argentinas.
“Nos solidarizamos con cada uno de los trabajadores y productores afectados por la inundación de los campos y ponemos a disposición nuestra amplia red de delegaciones en el interior del país para colaborar con ellos”, sostuvo Ramón Ayala, titular del Renatre.
“Asimismo, solicitamos a las autoridades nacionales y provinciales que instrumenten las medidas necesarias para paliar la situación de las familias afectadas ante esta emergencia”, concluyó Ayala.

Prima el cese de actividades en los aserraderos correntinos Desde la Asociación Plan Estratégico Forestoindustrial de Corrientes (Apefic), integrada por las cámaras y organizaciones del sector público y privado, elevaron una propuesta para enfrentar la crisis climática y económica en el sector. Solicitaron se analicen medidas como pagar la energía eléctrica por medio de cheques de pago diferido, un planteo que resulta recurrente en los industriales consultados.
También considerar la prórroga de vencimientos de impuestos provinciales, acceso a créditos con tasas subsidiadas para negociar las cobranzas y créditos blandos para que se pueda seguir trabajando sin cortar la cadena de pagos . Asimismo, “la asistencia para la reparación de caminos y el ayudar a que escurra rápido el agua sobre las rutas es también una prioridad”, explicaron desde la asociación.
De Apefic realizaron un relevamiento de industrias para conocer su estado de situación tras las lluvias de enero. “De los 24 aserraderos relevados de la cuenca de Santa Rosa, once están inundados con imposibilidad de operar y trece están a la espera de poder recibir materia prima, hecho que calculan demorará por lo menos dos semanas una vez que las lluvias cesen”, confirmaron.
En ese sentido, agregaron que existe un cese de actividades generalizado, lo que repercute en unas 1.200 familias que se encuentran sin sustento económico, en el departamento el número asciende a 1.600.
“El 90 por ciento de los aserraderos de la cuenca se encuentran parados. Las playas de maniobras de los aserraderos, producto del exceso hídrico registrado, están intransitables tanto para camiones como las propias máquinas. La actividad forestoindustrial se ve afectada no solamente por la imposibilidad de operar la industria debido a la inundación y encharcamiento, sino también por la dificultad de acceder a la materia prima por las condiciones de anegamiento en que se encuentran los montes condicionando así su explotación”, indicaron los empresarios.