Denuncian un presunto encubrimiento policial tras siniestro fatal en Aurora

Cuando la mayoría se preparaba para celebrar con alegría la llegada del año nuevo, la tragedia golpeó de la peor manera a la familia de Víctor Blum (50). El pasado 30 de diciembre, su hijo Eliberto Fabián Blum (25) falleció a consecuencia de las gravísimas lesiones que padeció en un siniestro vial en el acceso a la localidad de Colonia Aurora.
Desde entonces, en esta pequeña comunidad recostada sobre el río Uruguay, límite con Brasil, no se habla de otra cosa que de las circunstancias del fatídico choque.
Familiares y allegados a la víctima vienen denunciando serias fallas en la instrucción policial, lo que habría conspirado contra el avance del expediente judicial que se tramita en el ámbito penal.
Según expresó Víctor Blum en diálogo con El Territorio, las sospechas de encubrimiento se basan en el parentesco que une a varios policías locales con el conductor del rodado que impactó contra la moto que conducía la víctima.
“Los propios parientes del que chocó a mi hijo fueron los que estuvieron en el lugar del accidente en un primer momento. Incluso el hijo es policía, y hay tres o cuatro parientes más que trabajan en la zona. Un testigo declaró que vio a un policía sacando envases de cerveza del coche”, subrayó Blum.
En dicho contexto, también puso en dudas el resultado del test de alcoholemia al que habría sido sometido el conductor del Fiat Argo, identificado como Juan M. (53), quien al otro día habría sido visto en el pueblo manejando otro auto.
Por ello, el 4 de enero, familiares y amigos realizaron una marcha por justicia, al tiempo que anticiparon que en los próximos días volverán a manifestarse frente a la comisaría local.

Prueba clave
El siniestro vial se registró el domingo 30 de diciembre, a metros del acceso a la localidad de Colonia Aurora. Blum iba al mando de una moto Honda 150cc, acompañado por su concubina y su pequeño hijo de dos años, circunstancia en la que fue impactado desde atrás por el Fiat Argo.
La mujer y el menor sufrieron algunos cortes y excoriaciones, aunque nada de gravedad, afortunadamente.
“Mi nuera y mi nietito se salvaron por un milagro de Dios. Ella dice que cuando sintió el impacto le agarró fuerte a la criatura, por eso no salió despedido. Mi hijo voló, pegó contra el guardarrail y sufrió heridas gravísimas. Murió a los pocos minutos”, relató visiblemente conmovido.
Asimismo, exhibió una imagen que habría sido extraída del sistema de cámaras de seguridad de un comercio ubicado frente al lugar del hecho, donde se observa el preciso momento en que el Fiat impactó en la parte trasera de la motocicleta.
Al respecto, mencionó que “en la cámara del negocio se ve claro cuando le pegó de atrás. Después arrastró la moto unos 150 metros, lo que demuestra que el coche iba a muy alta velocidad”.
“Yo sé que no voy a recuperar a mi hijo, pero quiero que se haga justicia. Pienso que la Policía hizo las cosas mal y hay que investigar. Para colmo, al día siguiente la persona que mató a mi hijo andaba por el pueblo manejando otro auto, como si nada”, reclamó.

Dudas y pericias
Sobre el parentesco del conductor del Fiat con varios policías locales, Blum mencionó que no sólo habrían sacado y escondido envases de cerveza del coche, sino que también “le daban agua a cada rato y después le dejaron irse con un hermano. En ningún momento estuvo demorado, como pasa en otros casos, más cuando hay un fallecido”.
Ante las suspicacias que generó el accionar de los uniformados de la comisaría local, el progenitor decidió radicar una denuncia ante el propio jefe de la Unidad Regional XI de Aristóbulo del Valle, comisario mayor Ramón Elizardo Sosa, con jurisdicción en Colonia Aurora.
“Yo me crié en el monte, casi no tengo estudios y toda la vida trabajé en la chacra, pero no por eso voy a dejar que hagan lo que quieran. Mi hijo perdió la vida porque un conductor le chocó de atrás y tengo muchas dudas sobre lo que después hicieron sus parientes que son policías”, remarcó.
Si bien Blum manifestó que le informaron que el examen de alcoholemia arrojó resultado negativo, aseguró que los uniformados demoraron varias horas en realizar las pericias de rigor en el lugar del hecho.
“El choque fue a eso de los 15.40, pero hicieron las pericias recién de tardecita, a eso de las 19. Es raro que tarden tanto”, indicó.
Oportunamente, desde la UR XI informaron que luego del siniestro se procedió al secuestro de los rodados y por disposición del magistrado interviniente el conductor del Fiat Argo fue notificado de la causa, aunque no quedó demorado.