Denuncian que embarazada viajó a Buenos Aires engañada y desapareció

martes 18 de septiembre de 2018 | 4:30hs.

Por Daniel Villamea Corresponsalía Oberá

La propuesta fue seductora, ya que implicaría una mejor calidad de vida para ella y sus hijos. Pero la ilusión se desvaneció enseguida y de la peor manera.

Familiares de una joven denunciaron que la muchacha viajó a Buenos Aires por un supuesto trabajo, aunque luego se comunicó pidiendo auxilio y dijo que querían sacarle los chicos, tras lo cual perdieron todo tipo de contacto.

En consecuencia, el último viernes su familiares radicaron una denuncia ante la Comisaría de la Mujer de Oberá, aunque hasta el momento no obtuvieron ninguna novedad sobre el presunto paradero de la joven identificada como Valeria Viviana T. (23). En diálogo con El Territorio, su hermana Andrea precisó que la joven es madre de tres chicos, de 6, 4 y 1 año, los que el martes pasado viajaron con destino a Buenos Aires. Además, Valeria está embarazada de cinco meses.

“Estamos desesperados y no sabemos a quién recurrir. Ya hicimos la denuncia en la Comisaría de la Mujer y en la línea 145 (de asistencia y denuncias por trata de personas), pero no sabemos nada de mi hermana ni de mis sobrinitos. Para colmo, ella está embarazada y dijo que parece que le quieren sacar a los hijos”, alertó Andrea durante la charla con este matutino.

Visiblemente preocupada, precisó que una conocida de Oberá que reside en Buenos Aires le ofreció trabajo como empleada doméstica a su hermana. Incluso, le prometió una paga de 600 pesos por día y ayuda para cuidar a sus pequeños hijos. “Valeria tuvo muchos problemas con el marido y se separó. Él era muy agresivo, le pegaba. Como esta supuesta amiga sabe todo, le ofreció que vaya a trabajar en una casa de familia en José C. Paz (Buenos Aires), mi hermana aceptó y la amiga le mandó los pasajes. Viajó el martes pasado y desde el jueves no sabemos nada de ella ni los chicos”, remarcó.

El último llamado

Andrea mencionó que su hermana escapó de la violencia de género a la que era sometida por parte de su concubino. La pareja y sus hijos residían en la localidad de Santa Ana. Al respecto, comentó que “el marido le pegaba y la última vez le atacó con un machete. Ahí ella decidió venir a Oberá, a casa de mi mamá. En realidad, se escapó del marido porque le iba a terminar matando”.

Fue así que hace poco más de un mes la joven llegó a Oberá y se instaló con sus hijos en el asentamiento lindero al barrio 200 Viviendas, entre Barrio Norte y Villa Stemberg. Más allá de la contención familiar, el hacinamiento y la pobreza la impulsaron a buscar trabajo, aunque no resultó fácil estando embarazada y con tres hijos pequeños a cargo. En ese contexto surgió la propuesta de R. G., una obereña que actualmente reside en Buenos Aires y le mandó los pasajes.

“Viajaron el martes. El miércoles llamó para avisar que llegaron bien. Se la notaba contenta, nada raro. Pero al otro día, el jueves, llamó llorando y dijo que no era lo que le prometieron, que al final parecía que le querían sacar el bebé. Lloraba y hablaba despacito, como para que no la escuchen. De ahí no supimos más nada. No atendió los llamados ni los mensajes de Whatsapp, por eso el viernes hicimos la denuncia en la Comisaría de la Mujer”, detalló Andrea.

Según explicó, al llegar su hermana le comentó que se dirigían a José C. Paz, pero “el último día que hablamos dijo que la llevaron a otro lugar que no sabía dónde era y que la habían separado de los chicos”.

En ese punto, la angustia se hizo llanto y Andrea pidió disculpas. “Es de terror lo que estamos sufriendo. A mi hermana la engañaron porque saben que tiene mucha necesidad y se quieren aprovechar. Le rogamos a Dios que no sea tarde”, expresó al finalizar.

Las sospechas

En diálogo con este medio, familiares de la joven madre especularon con la posibilidad de que ésta haya sido víctima de personas que pretenden quitarle a sus hijos, o al menos a los más chicos. Tal vez le hicieron una propuesta y la rechazó.

“El jueves cuando llamó dijo que todo fue un engaño, que le llevaron allá para sacarle al bebé de un año y al que está en la panza. No pudo hablar mucho, pero se nota que algo pasó o le dijeron. También contó que le separaron los hijos. Ella lloraba desesperada. Llegó a decir que si no la ayudamos va a terminar en un cajón”, aseguró su hermana.

En tanto, indicó que tras la denuncia ante la Comisaría de la Mujer las autoridades policiales se comprometieron a contactarse con sus pares de Buenos Aires para cruzar información al respecto, aunque hasta el cierre de esta edición no había novedades.