Culpables los implicados por la muerte de misionera
viernes 25 de septiembre de 2020 | 5:00hs.
Iván Pardo, tío de Naiara Brione, la misionera de 8 años asesinada en España hace tres años, fue declarado culpable por asesinato agravado por un jurado de nueve personas, informaron diferentes medios españoles.
Además, el hombre se enfrenta a otra pena de entre 3 y 5 años de cárcel por el delito de violencia física y psíquica en el ámbito familiar. Mientras, a su hermano Carlos, y su madre, Nieves Pena, les han considerado culpables de consentir las torturas y serán condenados a delitos de entre 3 y 5 años por el mismo delito.
El diario La Razón detalló que los integrantes del jurado consideraron a Iván responsable de torturar a la niña “obligándola a permanecer de rodillas sobre ortigas, grava, granos de arroz o sal gruesa, le golpearon en brazos, piernas, espalda y cabeza, le privaron del sueño para hacer los deberes y estudiar, le humillaron colocándole una diadema con orejas de burro sobre la cabeza y le colocaron pañales a la vez que le grababan con los móviles y lo transmitían a otros miembros de la familia”.
Ahora el presidente del tribunal, Santiago Serena, redactará el fallo y decidirá si dicta la primera condena por prisión permanente revisable de Aragón al ser la víctima menor de 16 años, como han vuelto a solicitar tras la lectura del veredicto la fiscal María Ángel Hernández y las dos acusaciones particulares ejercidas Luis Marín y Marcos García Montes en nombre de la madre y el padre biológicos de la niña, respectivamente.
Esto significaría que no obtendrá ningún beneficio carcelario en 25 años.
Crueldad sin límites
El crimen de la pequeña ocurrió en julio de 2017 en la localidad española de Sabiñánigo -cercano a Zaragoza- donde vivía junto a su mamá y su nueva familia.
Entonces conmocionó a todo la provincia y más aún a todos los vecinos del barrio Santa Cecilia, de Candelaria, donde la niña creció y vivió sus primeros años.
Luego se descubrió que os malos tratos en la vivienda eran algo habitual, según quedó acreditado en el examen de autopsia que le practicaron a la niña, que murió en el hospital de Zaragoza tras ser trasladad en helicóptero desde el de Huesca dada la gravedad de las lesiones.
Según la investigación, había sido torturada por no hacer los deberes.
Además, el hombre se enfrenta a otra pena de entre 3 y 5 años de cárcel por el delito de violencia física y psíquica en el ámbito familiar. Mientras, a su hermano Carlos, y su madre, Nieves Pena, les han considerado culpables de consentir las torturas y serán condenados a delitos de entre 3 y 5 años por el mismo delito.
El diario La Razón detalló que los integrantes del jurado consideraron a Iván responsable de torturar a la niña “obligándola a permanecer de rodillas sobre ortigas, grava, granos de arroz o sal gruesa, le golpearon en brazos, piernas, espalda y cabeza, le privaron del sueño para hacer los deberes y estudiar, le humillaron colocándole una diadema con orejas de burro sobre la cabeza y le colocaron pañales a la vez que le grababan con los móviles y lo transmitían a otros miembros de la familia”.
Ahora el presidente del tribunal, Santiago Serena, redactará el fallo y decidirá si dicta la primera condena por prisión permanente revisable de Aragón al ser la víctima menor de 16 años, como han vuelto a solicitar tras la lectura del veredicto la fiscal María Ángel Hernández y las dos acusaciones particulares ejercidas Luis Marín y Marcos García Montes en nombre de la madre y el padre biológicos de la niña, respectivamente.
Esto significaría que no obtendrá ningún beneficio carcelario en 25 años.
Crueldad sin límites
El crimen de la pequeña ocurrió en julio de 2017 en la localidad española de Sabiñánigo -cercano a Zaragoza- donde vivía junto a su mamá y su nueva familia.
Entonces conmocionó a todo la provincia y más aún a todos los vecinos del barrio Santa Cecilia, de Candelaria, donde la niña creció y vivió sus primeros años.
Luego se descubrió que os malos tratos en la vivienda eran algo habitual, según quedó acreditado en el examen de autopsia que le practicaron a la niña, que murió en el hospital de Zaragoza tras ser trasladad en helicóptero desde el de Huesca dada la gravedad de las lesiones.
Según la investigación, había sido torturada por no hacer los deberes.
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