Covid-19 y dengue, la sindemia más importante luego de HIV y tuberculosis

jueves 10 de septiembre de 2020 | 9:10hs.
Covid-19 y dengue, la sindemia más importante luego de HIV y tuberculosis
Covid-19 y dengue, la sindemia más importante luego de HIV y tuberculosis

En plena batalla contra el coronavirus, cuando la cantidad de casos va en aumento y las expectativas por la vacuna se disipan, se avizora otra problemática: la enfermedad transmitida por el mosquito Aedes aegypti.

“El dengue obviamente fue la epidemia oculta por el Covid-19”. La frase le corresponde al infectólogo Gerardo Laube, y resuena en un escenario complejo, como lo es la región NEA y sobre todo Misiones, donde la enfermedad es endémica.

Laube, quien vive en Ciudad de Buenos Aires y se desempeña como profesor titular de Microbiología y de Infectología de la Facultad de Medicina Fundación Barceló, en Corrientes, dialogó con El Territorio sobre la importancia de la prevención, la no automedicación y la consulta precoz al médico ante la sindemia Covid-19 y dengue.

El país atravesó el brote más  importante en 2019-2020, superior incluso al registrado en 2015-2016. En ambos eventos, Misiones representó zona de riesgo por la cantidad de casos notificados y la amenaza siempre latente de la frontera con Brasil y Paraguay, países donde la enfermedad causa estragos. En ese contexto, irrumpe el Sars-Cov-2. La pandemia, en tanto, no impacta de la misma manera en Misiones que en el resto del país, la provincia todavía ostenta cierto equilibrio epidemiológico.

“La sindemia es la simultaneidad de dos epidemias en un contexto social que lo favorece”, explicó el especialista, al tiempo que rememoró la primera vez que se abordó el concepto. “Nosotros infectológicamente lo utilizamos hace algún tiempo atrás. Hace quince o 20 años  con la asociación de HIV y tuberculosis. Ahí fue donde primariamente los infectólogos usamos ese término porque muchos pacientes HIV, con Sida, al diluir su inmunidad celular reactivaban la enfermedad tuberculosa. Es y sigue siendo una situación bastante dramática porque muchos de los casos de tuberculosis en muchos pacientes son resistentes a los medicamentos habituales que se usan en los tratamientos y además por las cantidad de fármacos que tenían que recibir, tres para el HIV, para una tuberculosis grave, cuatro, con lo cual ya estábamos en siete medicamentos con todas las acciones que eso generaba. Esa fue una de las primeras veces en la que se mencionó sindemia”, detalló Laube.

“En la actualidad se volvió a reflotar en función de la asociación en el norte y centro del país, dengue y Covid-19, en el norte del país y la región metropolitana de Buenos Aires se producen, con distintos perfiles epidemiológicos, el dengue que tiene que ver con el Aedes y el mosquito vector, siendo las manifestaciones clínicas la fiebre, dolor ocular, dolor de cabeza, que con el coronavirus aparece de manera más tardía. A medida que el dengue fue cayendo en la notificación de casos, cuando empezaron las épocas más frías, aparece el Covid, que tiene compromiso respiratorio, cosa que no tiene el dengue. De todas maneras son las dos circunstancias más importantes en este momento, porque fue el año en el que más casos de dengue hubo en Latinoamérica. A eso se suma el Covid-19”, argumentó.

“El dengue fue solapado pese a los miles de casos que tuvo el país. Porcentualmente comparando las complicaciones del dengue, son menores respecto a los pacientes que necesitan terapia intensiva. En Covid hay un porcentaje bajo en la gravedad, la cantidad de casos hace que en números absolutos sea importante”, consideró.

“Lo primero es la prevención, el dengue no tiene vacuna todavía, hay algunas que se están evaluando pero no hay ninguna en el país autorizada por la Anmat. La única vacuna es combatir el mosquito, evitando todo lo que sea agua estancada en los lugares propios que rodean la casa porque el rango de vuelo del mosquito no es muy importante, por eso los principales brotes se dan en centros poblados. Evitar tener agua estancada en recovecos del patio o jardín. Esto no evita la posibilidad de que alguien sea picada por un vector, hembra, es la consulta médica la que se impone. En general los primeros días transcurren con un cuadro febril, no mucho más. Pero siempre es conveniente la consulta a las 48 o 72 horas porque es ahí donde se pueden agravar los síntomas que requieren del tratamiento médico. Será el profesional quien determine las pautas de alarma y el seguimiento del paciente”, aconsejó.

“Con el dengue el problema, se sabe, es la asociación de varios serotipos, que vivido en un tiempo prudencial de la primera enfermedad queda expuesto a un serotipo diferente puede causar dengue hemorrágico y eso sí requiere la atención del sistema de salud”, remarcó. En ese sentido, el panorama local es preocupante dado que en el período 2019-2020 coexistieron tres de los cuatro serotipos: DEN-1, DEN-2 Y DEN-4.


“También tiene manifestaciones asintomáticas; recuerdo que en 2016, la localidad chaqueña de Charata saturó los sistemas de salud en ese momento. No se conocía a ciencia cierta qué era lo que pasaba pero al principio hubo mucho temor y se saturaron los sistemas de salud. En este momento los cuadros febriles sin manifestación respiratoria hacen pensar en dengue, salvo la aparición de alguna complicación de estado moderado a severo de los pacientes, no van a la consulta con la frecuencia que lo hacían en 2015-2016”, dijo el médico, y agregó: “La temperatura favorece que el dengue sea endémico en la región además el mosquito se está adaptando a temperaturas más cálidas y como es de hábito peridomiciliario e intradomiciliario a veces en el mismo patio o jardín que sirve de estancamiento de agua para los huevos del mosquito”.

El 0800 seguirá vigente
 
Con la declaración de la emergencia epidemiológica por brote de dengue y coronavirus, el gobierno de Misiones implementó una serie de medidas para minimizar el impacto de ambas enfermedades. La puesta en marcha de una línea de asistencia médica, 0800-444-3400, buscó evitar la congestión en los centros de salud y desde Salud Pública .Esta vía de comunicación gratuita funciona las 24 horas y los siete días de la semana. Si bien la cantidad de consultas disminuyó considerablemente respecto a los primeros meses de la pandemia, sigue en vigencia. Antes, el 75% de las consultas era por dengue, pero la demanda actual en su gran mayoría es por cuadros compatibles con Covid-19 o preguntas relacionadas, como por ejemplo cuándo termina la etapa de aislamiento para quienes ingresan desde otros puntos del país.“De 100 o 150 consultas que teníamos en turnos de seis horas, ahora recibimos 100 en total, en un día. O sea que disminuyó muchísimo, antes atendíamos hasta 500 en una sola jornada, desde pacientes con síntomas hasta denuncia por baldíos sucios. Ahora todas las llamadas prácticamente son relacionadas al Covid, dengue muy poco”, había señalado en diálogo con El Territorio Daniel Mattivi, director de Recursos Humanos del Ministerio de Salud Pública de la provincia y coordinador del 0800. “Ahora están llamando porque ingresan a la provincia con certificado de Covid negativo, algunos que vienen para cumplir aislamiento e informan, también los que tienen el alta después de los catorce días”, había explicado Mattivi.