Chofer del internacional se olvidó el DNI y causó caos

lunes 20 de enero de 2020 | 6:00hs.
En la mañana de este domingo se vivió una situación muy particular en la cabecera argentina del puente internacional San Roque González de Santa Cruz, que dejó al descubierto ciertas prácticas injustas en torno al control de colectivos internacionales.
El problema fue que una veintena de personas quedó varada en la cabecera del mencionado puente, luego de bajar del ómnibus de la línea internacional que los traía hacia la ciudad de Posadas.
Tal situación se generó ante la negativa del personal de Migraciones de realizar el control migratorio pertinente, ya que detectaron que el chofer del ómnibus que los transportaba, no traía consigo su cédula de identidad.
Por lo tanto, por protocolo se lo envió al chofer con la unidad de regreso hacia el vecino país Paraguay, al tiempo que se les negó el ingreso al país a los pasajeros, hasta tanto no llegara una nueva frecuencia del colectivo internacional para que los suba.

Tensión y malestar
El momento generó una sensación de malestar general entre los pasajeros, quienes aducían que no tenían nada que ver con la empresa de colectivos y su error.
De hecho, estaban con todos sus derechos intactos para estar en suelo argentino. Sin embargo, por un largo tiempo los mantuvieron haciendo fila bajo los rayos del sol y soportando los calores extremos que se registraron durante el día de ayer en la ciudad.
Personas de avanzada edad que no podían estar paradas mucho tiempo así como niños expuestos al sol, fueron el detonante de las protestas que comenzaron a ebullecer a medida que transcurría el tiempo y no obtenían una solución para poder continuar el viaje.
Este hecho lamentable puso en cuestionamiento la problemática de la falta de conectividad del nuevo centro de fronteras hacia la ciudad de Posadas, donde en situaciones como estas, las personas se sienten atrapadas a expensas de las autoridades de turno.
“En tiempos atrás sí se podía salir de la frontera caminando y sin tener que esperar otros ómnibus u otro medio de transporte”, alegó Daniel Portillo, uno de los ofuscados pasajeros que debió poner el pecho a la situación.