Cafeterías estuvieron a pleno en días de bajas temperaturas

sábado 13 de julio de 2019 | 4:00hs.
Cafeterías estuvieron a pleno  en días de bajas temperaturas
Cafeterías estuvieron a pleno en días de bajas temperaturas
Victor Piris

Por Victor Piris vpiris@elterritorio.com.ar

El hábito de compartir un café y alguna que otra preparación se instaló con fuerza en Posadas. En las últimas semanas, las cafeterías resaltaron que los días de frío activaron su mejor temporada. Pero también contaron que es más frecuente el público que ya adoptó como un hábito el compartir al menos un cortado con un amigo o hacer una pausa solitaria para planificar su día. 
La mayor actividad se vio por las tardes y allí crecieron los pedidos de cafés más elaborados, como los capuchinos con diversos agregados de sabor. También atado a las bebidas, las preparaciones dulces y saladas que los comercios seleccionan especialmente para atraer clientes. 
Y en los próximos días, con una nueva baja de temperatura pronosticada, proyectan una atención con locales a pleno.  
“A pesar de estos años complicados, cada vez que viene el frío y arrancan las vacaciones de invierno tenemos más gente. Cuando abrimos hace cinco años éramos una de las pocas cafeterías, hoy en día cuando baja la temperatura todos los negocios están llenos”, comentó Marcelo Tronzano, propietario de Café París. 
Explicó como tendencia que hay mucha variedad de pedidos y la gente es más exigente. “Al principio los pedidos eran muy estructurados, no salían de cortados y café con leche. Hoy es diferente, se piden muchos capuchinos  y bebidas saborizadas con vainilla, avellana y para los chicos las chocolatadas”. 
En cuanto a precios, comentó que un expreso vale 60 pesos (un café pequeño) y un XL (el café más grande) cuesta 100 pesos. Un capuchino cuesta 85. 
En cuanto a las comidas, se explicó que hay tanto demanda de dulces como de preparaciones saladas. “Nosotros tenemos pastelería propia y por eso vamos viendo qué ofrecer según el clima. Pero el promedio de la gente lo que más pide es el tostado de jamón y queso. El tostado cuesta 200 pesos y se puede compartir. En tanto la porción de torta, también para compartir, vale 140 pesos”.
Por su parte, desde Café Martínez, una de las grandes franquicias presentes en la ciudad, se destacó la mayor afluencia del público que llega por la tarde. 
“El horario donde más público atendemos es a las 18, es un público muy variado. También tenemos nuestros clientes que llegan por la mañana y es gente en general mayor”, comentó Silvia Benítez, encargada del local. 
Apuntó a que tienen variedad de tortas, budines y de sandwiches para ofrecer a sus clientes. Y que hay una demanda muy dividida entre preparaciones saladas y dulces. “Los miércoles tenemos descuentos del 15% para mesas de hombres y los jueves 15% para las mesas de mujeres”, se acotó. Y apuntó que también se venden con frecuencia cafés para llevar: “Tenemos café desde 60 pesos”, recordó. 
En tanto en Bonafide, con un nuevo local por calle Félix de Azara casi San Martín, se coincidió en que el horario de la tarde es el que más público moviliza. Y que los recientes días de bajas temperatura multiplicaron pedidos. 
“Viene más gente por la tarde, cerca de las 18 es cuando tenemos más pedidos”, comentó Miriam Esquivel, encargada del local. Y comentó que hay pedidos muy variados , pero crecieron “los capuchinos y los tenemos variados desde el tradicional, el que tiene caramelo o el italiano”.

La merienda ganó lugar en la gastronomía 

El consumo de café marca una mayor actividad en algunos momentos determinados del día. En Posadas, las cafeterías coinciden en que están creciendo, al menos en el plano local, los pedidos por la tarde. Desde Amarú Café Bar, señalaron que el misionero llega con mayor frecuencia a merendar. O al menos se observa un mayor movimiento de pedidos durante esas horas. “En Posadas se viene incrementando bastante el salir a merendar. La gente sale bastante y el turismo de las últimas semanas también ayudó”, comentó Maximiliano Pasos, propietario del negocio céntrico. En cuanto a los pedidos locales, destacó que los consumidores de la región piden “más chipitas” para compartir con el café. En cuanto a precios, un café básico o cortado cuesta 65 pesos. Y hay promociones o combos especiales que se arman a criterio del cliente. “Tenemos un combo de un café con leche con tres medialunas, vaso chico de jugo de naranja a 150 pesos”. Pasos recordó que en su caso abrió su café bar en julio de 2018, en medio de plena crisis económica, pero pese a ello el consumo se mostró en ascenso.  “El negocio va yendo bien, vimos un crecimiento desde que abrimos. Después depende también del clima, últimamente el frío ayudó bastante. Tal vez en verano vemos días más tranquilos, pero no vemos una caída hasta ahora muy preocupante”, explicó en diálogo con el programa 'Acá te lo contamos' por Radioactiva.