De prevención y vehículos seguros

Los números hablan por sí mismos y cada tanto hay que repetirlos para que no pierdan vigencia o caigan en el olvido. Actualmente el 70% de los internados en terapia intensiva del hospital Madariaga ingresaron con traumatismos graves por siniestros viales. Este dato es coherente con la cantidad de muertes que se registraron el año pasado, un total de 256 según los datos de la provincia (cifra que asciende a 356, según la Asociación Luchemos por la Vida)

“Las víctimas que ingresan a terapia intensiva tienen distinta severidad pero siempre son pacientes graves. De 17 que tenemos hoy, diez personas tienen además de politraumatismo, trauma encéfalocraneano y necesitan soporte de oxígeno”, dijo ayer a este diario Orlando Querencio, jefe de la Unidad Crítica y director de la Red de Traslado (página 6).

Pero además sumó otro dato clave: “Nuestras estadísticas muestran que los tipos de colisión más comunes son auto-moto y derrapes de motocicletas”.  Sobresalen campos donde hay que insistir. Una es la prevención. Se está trabajando, por cierto. La instalación de los radares móviles de la policía con los conos respectivos en las rutas nacionales (o los radares como los que se usan en Brasil y se están instalando en Posadas) que realmente cumplen la función preventiva, es parte de ello.

El otro dato sensible que sale la frase del funcionario tal vez merezca un debate más profundo en la sociedad. Los accidentes que tienen a motocicletas como protagonistas, y los derrapes de las motos en particular. Un experto lo dijo de este modo: en el plan de abaratar costos para ganar mercado las motocicletas vienen cada vez con menos calidad donde la seguridad que debe prestar el vehículo (frenado seguro, estabilidad en ruta) es la parte que más se resiente.