Alem vive a pleno la Fiesta de la Navidad

Con un desfile de carrozas circundadas por coreografías llevadas adelante por más de 650 personas entre niños, jóvenes y adultos, contando la historia de cómo nació el planeta según La Biblia hasta la llegada de Jesús, empezó anoche la 23ª edición de la Fiesta de la Navidad y la quinta desde su jerarquización a Fiesta Nacional. El escenario artístico presentaba al cierre de nuestra edición al ballet Alma Gaucha, el grupo Mitá y los dueños de casa, el grupo folclórico Coincidencias.
Ya desde principios de semana, las más de 250 plazas hoteleras con las que cuenta Alem están agotadas para el fin de semana y ayer se veían visitantes de distintos puntos de la provincia junto a turistas de Brasil y Paraguay que visitaban la localidad esperando el inicio de la fiesta.
Apertura
A las 20, el tradicional corte de cintas fue el momento en el que las cuatro hectáreas y media que componen el parque temático se abrieron al público para comenzar a mostrar un lugar donde, al ingresar, se puede ir recorriendo a través de distintos puntos perfectamente secuenciados, la historia bíblica con representaciones mediante grandes estatuas que muestran a personajes y momentos.
En la primera recorrida, el intendente local, Diego Sartori, junto al vicegobernador de la provincia, Oscar Herrera Ahuad, fueron guiados por el circuito por el presidente del comité organizador de la fiesta, Marcelo Dacher, quien les mostró el impecable trabajo de decorado y coordinación con diferentes postas que incluyeron ballet de distintas escuelas y hasta una  orquesta de viento que en vivo entonaba villancicos.
El gran predio de la fiesta logra una mezcla casi increíble entre lo informativo de la historia y el ensueño de la Navidad que se vislumbra en el rostro de los niños que corren y hacen largas colas para visitar la casa de Papá Noel, donde se ve al personaje durmiendo en su habitación, en su comedor, en su cocina o en el living, donde se hallan varios muñecos finamente construidos en los talleres de la fiesta que sirven para miles de fotografías de chicos, y no tanto, porque en definitiva la magia de la Navidad trasciende edades.

Gradas colmadas
Antes de las 21, cuando comenzaba el desfile, las tribunas colocadas a la vera de la avenida Libertador frente al predio de las exposiciones quedaron colmadas, al igual que las veredas, donde los vecinos de Alem y turistas se acercaban con sus sillones para disfrutar de un majestuoso show de luces, sonido y ornamentación.
Una veintena de carrozas pasó con sus coreografías representando desde el libro de Génesis de la Biblia, en el que Dios en seis días creó el mundo, avanzando hasta llegar a las tablas de los diez mandamientos entregadas a Moisés, la salida de la esclavitud del pueblo judío en manos de los egipcios, hasta llegar a la promesa de la venida de un mesías y finalmente el nacimiento de Jesús, entre otros momentos.
Toda la creencia religiosa se ve amalgamada en medio del desfile con la presencia de un Papá Noel que enamorado de la tierra colorada decide quedarse en ella y debe cambiar sus atuendos a bermudas, alpargatas y camisa para estar aclimatado a la realidad de la provincia.
El personaje, que hace deleitar a grandes y chicos, baila en plena avenida ritmos típicos de los inmigrantes, toma mate y es invitado con unas chipas por parte de quienes caracterizan a los habitantes de las colonias tierra adentro.