Alba Posse: pioneros quedaron sin nada y piden asistencia

sábado 01 de septiembre de 2018 | 6:00hs.
Bernardo e Irma juntos.
Bernardo e Irma juntos.
Nuevamente una tragedia golpeó a los abuelos Bernardo Díaz (80) e Irma Naffin (67), esta vez el fuego convirtió en cenizas el hogar que los albergaba y con esto otra vez los sueños se derrumbaron. Los veteranos pobladores de Alba Posse apenas se estaban recuperando de la inundación de 2014, cuando el río Uruguay no perdonó a las casas que próximas a la costa. Ahora, un cortocircuito destruyó en segundos la nueva vivienda donde habitaban.
El hecho ocurrió el jueves y en segundos se viralizaron en las redes sociales dos imágenes: una muestra a Bernardo sentado, observando el fuego a cierta distancia, y en la otra, abrazado a su esposa. Recién ayer los abuelos entendieron la gravedad de lo sucedido, porque al principio debieron ser asistidos con medicinas para no caer en una crisis de nervios.
Cuando había ocurrido la inundación, Irma y Bernardo tenían su casa frente al Correo Argentino, en la misma cuadra dónde está la comisaría y a tres cuadras la Aduana. “Esa vez sus familiares de Oberá y algunos que son gendarmes y están en el Sur sacaron préstamos y los ayudaron a levantarse de la inundación, porque habían perdido todo”, explicó a El Territorio Cristian Yung, nieto de Bernardo.
La pareja de abuelos es conocida porque Bernardo fue el primer carnicero del pueblo, pero cuenta Cristian que también trabajó en la Terminal de Ómnibus desde que se inauguró y por muchos años también atendió el club de Alba Posse.
Son una pareja querida y respetada por todos los pobladores, quienes corrieron a su socorro cuando vieron que una vez más la desgracia los golpeó.
Ahora tenían un comercio minorista, pero perdieron todo en el incendio de esta semana. “Justo habían realizado las compras para abastecer el almacén y se quemó todo. No pudimos salvar nada, ni siquiera los documentos y tampoco las tarjetas”, dijo, lamentando la situación, el nieto.
Ahora, según expresó Cristian, “la gente del pueblo está ayudando. Les trajeron para comer carne y mandioca, por ahora vamos tirando con eso. Porque mi abuelo recién cobra la semana que viene y se hace difícil porque nadie tiene plata en esta fecha”. Don Bernardo, por problemas de movilidad, usaba una silla de ruedas que quedó reducida a cenizas.
Respecto a la reconstrucción del hogar, por el momento construyeron una habitación para ambos y llegaron donaciones de colchones y ropa, porque se habían quedado con lo puesto. El nieto del matrimonio de ancianos sostuvo que los abuelos requieren de ayuda con maderas u otros materiales
“La gente es solidaria y les agradecemos toda la ayuda que nos brindan, lo mínimo que sea les sirve. Por ahora nosotros mismos estamos haciendo la limpieza y planificación, porque ellos no pueden esperar”, reconoció.
Para donaciones, los interesados pueden comunicarse con Cristian al 03755-15571793.