Un paraíso en la costa del Uruguay

La ciudad de Colón, ubicada a 700 kilómetros de Posadas, es uno de los destinos turísticos más importantes de la provincia de Entre Ríos. Entre sus atractivos cuenta con playas sobre el río Uruguay, termas, el Parque Nacional El Palmar, el carnaval y la Fiesta Nacional de la Artesanía, es su fiesta mayor, que convoca a artesano de todo el país en febrero.

La ciudad ribereña es agradable y tranquila, y pese a que cada verano llegan miles de turistas, sigue conservando la tranquilidad de un pueblo donde se puede dormir con la ventana abierta.

Colón posee 10 kilómetros de arenas blancas sobre el río Uruguay formando la continuidad de balnearios de agua dulce más importantes del país. Las playas e islas son uno de los principales atractivos de la ciudad y un lugar ideal para el descanso, la recreación y el disfrute de excelentes momentos.

La extensión de playas comprende los balnearios: Playa Norte, Punta Colón, Piedras Coloradas, destinadas más a las familias. Mientras, los jóvenes encuentran su lugar en los balnearios Santiago Inkier y Playa Nueva. Todos los balnearios se ubican a pocas cuadras del centro de la ciudad. 

En cada temporada de verano las playas cuentan con la habilitación y protección de guardavidas, que se quedan hasta entrada la noche custodiando a los visitantes. También hay playas accesibles con facilidades para personas con discapacidad.

En esta zona el río Uruguay es tranquila, ideal para la práctica de diversas actividades náuticas, tales como kayak, remo, windsurf, navegación a vela, esquí acuático y natación. En la costa hay prestadores habilitados que ofrecen alquiler de embarcaciones, paseos o prácticas de diversos deportes y actividades acuáticas.

Pese a su tranquilidad de pueblo, los comercios trabajan al ritmo del turista y por eso es normal ver tiendas y supermercados abiertos hasta las 22 o 23 para que los visitantes puedan disfrutar de la playa hasta que caiga el sol y luego realizar sus compras de noche.

La ciudad es agradable para recorrer a pie y conocer los lugares emblemáticos como la plaza San Martín, el edificio de la Municipalidad, la Catedral, el Parque Quirós, la avenida Costanera y sus playas.

En verano, además de las playas de la ciudad, se pueden visitar por medio de excursiones en bote a las playas agrestes de las islas y los bancos de arena del río Uruguay, donde se puede ir a pasar un día de relax y desconexión. 

El Parque Termal

El complejo acuático-termal está ubicado al norte de la ciudad. Las Termas de Colón cuenta con un amplio parque y espacios verdes con árboles nativos que albergan numerosas especies de aves, que se pueden avistar cuando cae la tarde. 

Las instalaciones son aptas para ser utilizadas todo el año, porque cuentan con tecnología de punta que permiten el manejo sustentable de caudales y temperaturas que se adapten a las distantes estaciones del año. El acuífero Guaraní, una de las más importantes reservas de agua del mundo, brinda agua termal mineralizada. Las aguas se clasifica en bicarbonatadas, sódicas, cálcicas, las cuales logran calmar afecciones reumáticas y respiratorias y también mejoran la textura de la piel.

El Parque Termal cuenta con 13 piscinas de agua termal dulce con diferentes profundidades, nueve de ellas son al aire libre, tres son cubiertas, una octogonal con jet de hidromasajes y un sector exclusivo de relax con ocho camas individuales de hidromasajes. 

Además, el complejo tiene el parque acuático habilitado en primavera y verano con toboganes para niños adolescentes y adultos mediante tres niveles. El estacionamiento es gratuito. 

El complejo cuenta con enfermería para emergencias médicas. Tiene un restaurante con comidas rápidas y regionales y se puede alquiler de sillones y mesas hasta las batas para la salida de las piletas. 

Abierto todos los días de 9 a 20, pero después de las 18 se puede recorrer el predio o ir a tomar mate y ver el atardecer y no se cobra la entrada

Si usted es de los visitantes que gusta comer afuera en temporada de verano, se tiene que armar de paciencia, ya que los bares y restaurantes, ubicados sobre la calle Urquiza, no dan abasto y los fines de semana de enero y febrero suele haber una espera de una hora para sentarse a comer. La recomendación es buscar los bares ubicados en la zona costera. 

Contacto con la naturaleza

El Parque Nacional El Palmar, ubicado a 57 kilómetros de Colón, tiene 8.500 hectáreas que protege uno de los palmares más importantes del país (palmeras Yatay). En el parque hay senderos para disfrutar de la naturaleza caminando, playas sobre el río Uruguay, sitios históricos, el centro de interpretación. Además, funciona un camping.

Se trata de uno de los palmares naturales más australes del planeta. Dentro del parque se hallan las ruinas de la Calera de Barquín.

Las palmeras yatay se distribuían originalmente no sólo en esta región, sino también en sectores de las provincias de Santa fe, Corrientes y Chaco, pero su población se vio disminuida notablemente debido a la instalación de cultivos y al pastoreo excesivo. Por su cercanía con los principales centros urbanos del país, este parque es uno de los más visitados y conocidos de la República Argentina. Lo llamativo de su paisaje poblado de palmeras, los bosques en galería que pueblan la costa del Uruguay. Está surcado por los arroyos Ubajay, Los Loros, Palmar y Espino.

El Camino Principal vincula La Portada con el Área de Servicios mediante una ruta de ripio conservada permanentemente por maquinarias viales. Este camino tiene 11.500 metros de largo y finaliza en una playa de estacionamiento. A 10.100 metros de La Portada el camino se bifurca dando acceso al Sitio Histórico Calera del Palmar (a 1.100 metros) y a la playa y balneario de 500 metros de largo sobre el río Uruguay. Es un balneario no habilitado, pero en el que se permite su uso ya que durante la temporada estival se lleva adelante el Programa Playas Seguras y se contrata un servicio de guardavidas y con boyado. El sitio histórico cuenta con las construcciones en ruinas: destilería, casa de piedra, mirador, zócalo, puesto Blanco, capilla y cementerio.

Desde el camino principal se desprenden otros cuatro caminos vehiculares: al Mirador Arroyo Los Loros (de 3 kilómetros, permitido para uso a pie y en bicicleta), al Mirador La Glorieta (de 6 kilómetros), al Mirador Arroyo El Palmar (de 6 km) y al destacamento de la Prefectura (de 3 kilómetros, solo para excursiones contratadas para bicicletas). 

Existen cinco senderos peatonales denominados: La Glorieta (circular de 1.000 metros, comienza y termina en el Mirador La Glorieta), Yatay (circular de 500 metros, comienza y termina en el camino al mirador La Glorieta), Arroyo El Palmar (de 400 metros, vincula el mirador del arroyo El Palmar con ese arroyo), El Mollar (circular de 1.400 metros con cartelería informativa, comienza y termina en el camino principal y se vincula con el arroyo Los Loros por un pequeño sendero) y La Calera del Palmar (de 1.000 metros con cartelería informativa, vincula la intendencia con el sitio histórico a lo largo de la costa del río Uruguay). A partir de septiembre de 2008 el parque cuenta con dos observatorios de aves que se ubican en sitios estratégicos donde las aves acuden para alimentarse o anidar: el Observatorio del Pastizal (ubicado junto al camino arroyo El Palmar) y el Observatorio del Bosque (sendero de 300 metros desde la Calera del Palmar). 

Para conocer la historia 

Pero lo mejor para conocer la historia de Entre Ríos es visitar el Palacio San José, ubicado a 60 kilómetros de Colón. Fue la residencia de Justo José de Urquiza y conserva toda la historia del caudillo. En la actualidad es un museo y Patrimonio Histórico Nacional. La recomendación es hacer la visita con guías.

La soberbia mansión fue mandada a construir por el general Justo José de Urquiza con el fin de habitarla junto a su esposa Dolores Costa y la numerosa familia que formarían.

La residencia hospedaría, además, a través de los años, a numerosas figuras de reconocimiento nacional, y Urquiza dirigiría desde ella los destinos de Entre Ríos y de la Confederación Argentina.

Llamada por su propietario ‘Posta San José’, con el tiempo, su exquisitez y firmeza inspirarían a los visitantes a referirse a ella como ‘El Palacio’.

Fue la primera edificación del país en contar con servicio de agua corriente e iluminación generada por gas acetileno, y se convertiría tras la muerte y el abandono en el principal atractivo histórico de la provincia.

La estancia llegó a tener 2.500 hectáreas, de las cuales 20 estaban destinadas a parques, jardines y una gran quinta de frutales. En medio de éstos aparece aún el casco principal, en cuya suntuosa arquitectura se adivina una armónica mezcla de estilo renacentista italiano. Se conservan aquí piezas de valor histórico, documentos, objetos cotidianos… todo en una perfecta disposición de época que invita a conocer el pasado desde su apariencia. 

Posee más de 30 habitaciones, una de ellas marcada por el asesinato del general el 11 de abril de 1870.

Patio de Honor

Constituía el ambiente principal de la casa, rodeado de galerías con columnas toscanas. Las habitaciones estaban destinadas al uso familiar: sala de recepciones, comedor, dormitorios, baño, sala de juegos y escritorio político.

El lugar fue escenario de importantes agasajos efectuados a las diversas personalidades que visitaron la residencia, entre ellas el Presidente Domingo Sarmiento en 1870.

Actualmente destacan en este sector, además de la reconstrucción escénica de las habitaciones del pasado; la Sala Benjamín Victorica, la Sala Juan Manuel Blades, la Antesala, y la Sala de la Tragedia. Ésta última ocupa el dormitorio principal donde fuera asesinado el general Urquiza. Un altar, imágenes religiosas, una palma tendida sobre el lugar de deceso, y una dedicatoria de su esposa, dan al lugar su carácter emotivo.

Encontrarán en este sitio un lugar en el que el tiempo se ha suspendido allá por el 1800.

Sus enormes habitaciones, salas, pasillos y galerías han quedado tal como estaban dispuestas a la muerte de su dueño. El silencioso misterio que se esconde en muebles, muros y efectos personales de la familia, hace de este majestuoso lugar un reducto de incalculable valor, donde el viajero podrá escuchar historias susurradas por los rincones del mágico condominio.

En los patios, que se conservan según la disposición original, pueden apreciarse anquilosadas estatuas de cuyos rígidos gestos parecen brotar un sinnúmero de anécdotas de más de 150 años de existencia.

Dentro de los muros del Palacio se gestó un hecho trascendental para nuestro país: la Organización Nacional, además de firmarse tratados internacionales de gran envergadura para la Historia Argentina. Horarios de atención al público es de lunes a viernes de 8 a 19 y sábados, domingos y feriados de 9 a 18.

Otros atractivos

Colonia San José, ubicada a 9 kilómetros de Colón, es otras de las atracciones que tiene la región. Se puede conocer este pueblo que nace como una colonia de inmigrantes europeos en 1857. San José tiene cuenta con el Museo Histórico Regional y un complejo termal con piletas.

Otro lugar para visitar es el Molino Forclaz, que se encuentra a 4 kilómetros de Colón y es parte de la historia de las colonias de inmigrantes europeos. Fue declarado Patrimonio Histórico Nacional y los domingos hay feria de artesanos y de productores que venden sus producciones de las chacras de la zona.

Pueblo Liebig, ubicado a 11 kilómetros de Colón, también es una excursión para un día donde el tiempo no acompaña para ir a la playa. Tuvo su fundación con la instalación de un frigorífico inglés dedicada a producir extracto de carne. El frigorífico fue uno de los más grandes del mundo y en la actualidad se puede conocer la historia en el centro de visitantes y recorrer las viejas instalaciones y los barrios.

La fiesta mayor

La Fiesta Nacional de la Artesanía comenzó ayer y se extenderá hasta el 16 de febrero y es la mayor fiesta de Colón.

Durante más de una semana artesanos de todo el país se reúnen para mostrar y comercializar sus obras. También se realizan actividades y talleres y cada noche en el escenario principal se realizan espectáculos con importantes artistas nacionales y del exterior.

Mañana en el escenario principal se presentan Los Alonsitos, el martes será el turno de Abel Pintos y el miércoles será la noche de músicos entrerrianos. 

El jueves tocará El Indio Lucio Rojas y el viernes será el turno de La Vela Puerca. El cierre será el sábado 15 con Luciano Pereyra y el domingo 16 tocarán Los Auténticos Decadentes.