Un espacio para crear y perfeccionar la música

El sueño de aquel grupo de docentes y músicos de la provincia continúa en pie hace más de 40 años. Desde aquel momento, por la Escuela Superior de Música de Misiones (Esmu) pasaron miles de alumnos y la institución mantiene su objetivo principal, que es la promoción, difusión y valorización de la educación musical como formación integral de los alumnos.
Es así que actualmente son unos 1.200 alumnos los que transitan por sus aulas y eligen la música, en cualquiera de sus manifestaciones, para el desempeño como profesional en el futuro.
La Esmu ofrece tres tecnicaturas superiores que tienen una duración de tres años: en Sonorización y Musicalización con Medios Electroacústicos, en Música con Especialidad Instrumental o Canto Coral y en Intérprete de Música Popular con orientaciones en jazz & blues, rock y folclore. Así como el Profesorado en Música con cuatro años de cursado y Técnico Instrumentista o en Dirección Coral, que dura nueve años. A excepción de esta última, que puede ser cursada a partir de los 9 años, en todas las demás carreras, el alumno debe haber concluido el último año de la secundaria o estar en el Plan Fines, de finalización de los estudios secundarios.
Cabe destacar que todas las ofertas académicas de la Esmu son gratuitas, las clases no tienen cupo limitado y tampoco la edad de los alumnos es un impedimento. “Tenemos alumnos bastante grandes que les encanta lo que hacen y vienen para obtener ese título. Tuve el año pasado un alumno de 66 años y viene a la par de los más jovencitos, estudia con ellos”, destacó Sally Báez, licenciada en música y coordinadora de la Tecnicatura en Intérprete de Música Popular, que este año tendrá sus primeros egresados. En tanto, sí recomiendan, aunque no es excluyente, tener conocimiento del instrumento que elijan y alguna noción de lectura musical.
Las inscripciones para el ciclo superior continúan hasta este jueves, ya que el lunes arrancan las clases. Los interesados deben dirigirse a la Esmu (en la esquina de Colón y Roque Pérez) en el horario de 7.40 a 11.40.

Palabra de los profes
La Tecnicatura en Intérprete Musical abre este 2017 su tercer año, por lo que egresarán los primeros alumnos. La coordinadora Sally Báez habló sobre los objetivos que persiguen como docentes: “Que sea un músico profesional, un gestor cultural, pueda armar su grupo musical, asesorar a otros grupos. Siempre apuntando a un perfil profesional. Ellos pueden elegir entre canto o algún instrumento: saxo, guitarra, acordeón, teclado, piano, flauta. Que tenga herramientas para poder manejarse en el medio”.
Por su parte, Agustín Pérez Campos, coordinador de la Tecnicatura Superior en Sonorización y Musicalización con Medios Electroacústicos, destacó que el número de alumnos fue creciendo, así como el perfil. Sostuvo que años atrás se acercaban sonidistas y DJ que ya estaban trabajando y que en la actualidad hay una búsqueda por crear música electroacústica.
“La Tecnicatura en Sonorización no es sólo para sonidistas, un técnico que maneja los equipos o lo que se llama comúnmente como plomos, sino que es para hacer también creaciones musicales sin necesidad de tener instrumentos o instrumentistas. Puede hacer una pista, un jingle, cortinas de radio, música para teatro, para televisión. Queremos que sean un creativos musicales pero que su instrumento sea la computadora”, señaló Pérez Campos.
Por último, ambos se refirieron a la importancia de reforzar los conocimientos particulares pasando por la academia. “Por ahí la gente se pregunta ‘si en mi casa ya aprendo a tocar la guitarra por YouTube, tengo mi grupo, tengo trayectoria. Venir a estudiar una carrera para que me den un título que no me garantiza el futuro’. El título formaliza los aprendizajes. Esto le abre horizontes nuevos porque le da una perspectiva más grande, le da nuevas técnicas para que cuando se le agote lo que está haciendo pueda innovar en su propio estilo”, destacó Pérez Campos y agregó: “Dar herramientas para que la persona siempre se esté reinventando. Estudiar un carrera es seguir aprendiendo. Estructurar los aprendizajes lleva a que después se sepa cómo adquirir otros nuevos conocimientos”.