El guardián de los oleros

Sábado 20 de mayo de 2017

El jueves por la noche, una intensa lluvia cayó sobre la ciudad capital. Varias calles fueron anegadas. En el barrio El Porvenir I, por ejemplo, las casas de los vecinos se inundaron por el desborde de los arroyos Zaimán y Estepa. Entre las postales que se vieron ayer en la recorrida de El Territorio, este perro llamó la atención por su mirada y posición de alerta, cuidando los vestigios de lo que fueron ladrillos, que tendrán que volver a los hornos para adquirir otra vez su forma. (Más información en páginas 4 y 5)