La familia de Yess había pedido una restricción para su hija

Miércoles 27 de julio de 2016
Detrás del crimen, aflora el drama. Para los investigadores, en el crimen de María Yess (63) no habría dudas y entienden que el hecho está prácticamente cerrado por el lado de su hija Andrea M. (31), pero lo que más preocupa a la familia ahora es el futuro de las tres menores que quedaron en total desamparo.
El hecho conmovió a todo Puerto Rico el domingo a la noche, cuando la comerciante fue encontrada con un balazo en la cabeza. En primera instancia, se especuló con la posibilidad de que el asesinato haya sido cometido por un ex convicto con el cual Yess mantenía serios inconvenientes en el barrio, pero luego la pesquisa dio un giro inesperado para todos, menos para la familia.
A raíz de contradicciones observadas en la hija de la víctima, quien incluso fue la que dio el aviso policial, los pesquisas decidieron investigarla en profundidad. Allí, lograron establecer que la muchacha mantenía un relación muy conflictiva y violenta con su madre, por lo que le practicaron un examen de parafina que finalmente dio positivo.
La mujer fue detenida el lunes al mediodía y casi en paralelo una comisión policial viajó hasta Caraguatay, donde también capturó a Paulino O. (24), su ex pareja, de quien sospechan pudo haber tenido complicidad en el parricidio.
Además, el relato de la mujer también fue contrastado por las pericias realizadas en la escena del crimen. En su denuncia, Andrea había indicado que el disparo provino del exterior de la vivienda, pero los estudios criminalísticos determinaron que el tiro fue ejecutado en el interior de la propiedad ubicada sobre la calle Río Grande 145, donde la víctima tenía un kiosco.
En este contexto, si bien aún restan agregar elementos al expediente y todavía falta hallar el arma homicida, tanto para la Policía como para la Justicia no habría dudas en la autoría del hecho. Pero para la familia de la víctima eso no significa todo, ya que ayer expresaron su preocupación por el futuro de las tres menores que quedaron en desamparo.

Pedido previo y contexto violento
Las tres menores de 15, 12 y 9 años vivían al cuidado de Yess, debido al escaso compromiso que la madre mostraba para con ellas. Fuentes consultadas indicaron que las tres tienen padres diferentes y que la ahora detenida siempre les negó toda vinculación con sus progenitores.
Por estas razones, además de los constantes conflictos violentos, la familia decidió apartarse por completo de Andrea, quien finalmente regresó a la casa de Yess hace pocos meses, tras la fiesta de 15 años de su hija mayor, ocasión en que asistió sin el permiso de los familiares que organizaron el evento y recuperó la confianza de su madre. 
Fuentes consultadas por El Territorio consignaron ayer que incluso hubo familiares de Yess que en junio presentaron un recurso de amparo ante la Justicia local para solicitar “una restricción de acercamiento” de la mujer hacia sus hijas, por el peligro que consideraban.
“La familia presentó un pedido para que le apliquen una restricción a la mujer, porque todos temían que a las niñas les pase algo. Es más, la asesina tenía vínculos con gente pesada. Se mandó macanas con personas del contrabando y del narcotráfico, quienes la tenían amenazada y le decían que 'le iban a tocar el punto débil'. Entonces la familia pensó que las niñas estaban en riesgo, pero finalmente la terminó pagando la abuela. Si se hubiese actuado a tiempo quizás esto no hubiera ocurrido”, graficó una fuente cercana a la familia que prefirió el anonimato.
Ahora, con Yess fallecida y Andrea detenida, las tres niñas quedaron en completo desamparo y a la familia les preocupa su futuro. “Las chicas van a quedar al cuidado de sus familiares, pero habrá que ver quién puede hacerse cargo de las tres. Quizás tengan que ser divididas y se les cortaría el vínculo”, añadieron.
Por estos momentos, la Policía continúa en la búsqueda del arma homicida. Los investigadores establecieron además que Paulino cruzó el puente del arroyo Paranaí a las 20 del domingo y llegó a su casa en Caraguatay a las 23, período en el cual pudo haber ocultado o descartado el revólver calibre 22 con el cual mataron a Yess.
Por lo pronto, los uniformados ayer secuestraron una moto que pudo haber sido utilizada para la comisión del hecho.