Con la meta bien definida

Lunes 17 de julio de 2017
“Yo quiero ser famosa”, escribía (o mejor dicho decretaba) todos los días, en el espejo empañado del baño, Caro Domenech (17). Dicen que si algo se desea fuerte, se cumple, y así fue su caso. El momento revelador en el que se dio cuenta de que quería ser actriz fue cuando vio a su mamá en un escenario. A los doce debutó en Aliados, de la mano de Cris Morena, y hoy, con un futuro prometedor, brilla en el teatro.
Ella es Victoria en Desprincesada, la aventura de ser yo, la obra musical que protagoniza con su novio, Simón Hempe, Ana Acosta, Hernán “Curly” Jiménez, Emiliano Rella, Alejandro Paker y elenco en el Konex. “Mi personaje es una princesa que tiene miedo, pero que está segura de lo que quiere y está descubriendo algo completamente nuevo con ayuda del ‘hado padrino’”, dijo Caro.
Hubo un momento de quiebre en su vida. Fue cuando decidió que su camino iría por las tablas: “Una vez la vi actuar a mi mamá y dije ‘quiero hacer eso’. Todos los días después de ducharme, en el espejo empañado escribía ‘quiero ser famosa’. A partir de ahí mi familia me llevó a estudiar teatro hasta que llegaron los castings”.
En el 2013 se puso en la piel de Devi, de la mano de Cris Morena en Aliados. Caro define la experiencia como “increíble”: “Cuando me dijeron que había quedado, empecé a correr por toda la casa, saltar, jugar. Era el comienzo de un sueño cumplido”.
Al principio las cosas no fueron fáciles, ya que la joven actriz, que aún está en la secundaria, debió cambiar de colegio, lo que le generó cierta incertidumbre: “Fue un camino difícil, me costó dejar a mis compañeros de toda la vida. Fue un golpe fuerte pero mis nuevos compañeros me bancan, me fui adaptando y ahora estoy feliz”.
Muchas veces trabajar y estudiar con 17 años es cansador, pero Caro entiende que es parte del sacrificio que tiene que hacer por vivir de lo que ama. Además, en su casa siempre le insistieron en que más allá del teatro o la tele, la prioridad era la escuela.