A seis meses de la tragedia de Brasil, preparan una demanda

Viernes 16 de junio de 2017

Se cumplen hoy seis meses de la tragedia de Brasil, en la que estudiantes misioneros se dirigían a disfrutar de su viaje de egresados en Camboriú. El accidente que les costó la vida a tres jóvenes y dejó graves secuelas en otros ocurrió en la madrugada del viernes 16 de diciembre. Un micro de Río Uruguay contratado por la empresa de turismo Tabay Tours volcó a la altura del kilómetro 534 de la ruta 285, en el municipio brasileño de Sao Luis Gonzaga, a unos 75 kilómetros de la frontera con Misiones.
“Estamos preparándonos para realizar una demanda, que es el paso que sigue, recabando información, solicitando las actuaciones en Brasil así que estamos en ese proceso. Vamos a iniciar una causa que, más que nada, terminará en una reparación de tipo económica, porque restituir el brazo de nuestro hijo es imposible”, comentó Rubén Noguera, en diálogo con Acá te lo Contamos por Radioactiva 100.7.
Rubén es el padre de Matías, quien sufrió la amputación de su brazo izquierdo tras el siniestro vial. “No hay dinero que reemplace un elemento natural, pero por lo menos que la reparación económica le sirva para menguar esa pérdida”. Las demandas son de carácter individual, porque los contratos así fueron firmados, y serán presentadas contra "todos los involucrados, porque existen responsabilidades contractuales entre ellos", explicó Rubén, involucrando obviamente a Tabay Tours y a Río Uruguay.

“Nos queda un dolor que nos marca para toda la vida. Uno no está preparado para esto. Somos indiferentes a los accidentes hasta que te ocurren; cuando uno lo vive en carne propia, es distinto”, reconoce, y describe a su hijo: “Siempre fue un chico de fijarse metas en la vida”. Matías, Agustina Rolón y Érika Romero son los estudiantes que estuvieron internados en terapia intensiva en el Hospital Público de Santo Angelo. Érika fue la última en regresar a Misiones.

“No hay que dejarse vencer”
POSADAS. “Él está ahora en la Facultad de Ingeniería, en Oberá e hizo un grupo de amigos con los chicos del accidente; ellos de casualidad estaban por presentar una prótesis y en la secundaria hicieron una impresora 3D; se reúnen sábados y domingo y están avanzado en este proyecto”. Así describe Rubén cómo su hijo Matías está recomponiendo su vida tras el terrible episodio que le tocó enfrentar.
Matías, por su parte, fiel al perfil descrito por su familia, avanza en gestiones con la Escuela de Robótica y el hospital Ramón Madariaga para concretar su sueño: construir una prótesis.
"Se me ocurrió la idea de que se podía hacer en Misiones, los que quieran consultarme sobre el proyecto pueden revisar la página de Facebook Prótesis mioeléctricas o a mi teléfono, 0376-15429-5126”.
“Salí adelante gracias al apoyo de mi familia y de mis compañeros”, sostiene, y agrega: “Hay que vivir la vida al máximo, no dejarse estar. Esta es mi segunda chance, por eso quiero estudiar y recibirme de ingeniero electrónico”.
“Pudo haber sido peor, no hay que dejarse vencer por ninguna situación. Podemos caer, pero  hay que volver a levantarse y seguir andando”, concluyó.