Voy con Vos, educación en las escuelas rurales de Chaco
Miércoles 21 de marzo de 2018 | 22:30hs.
Se inició el ciclo lectivo y nuevamente se ponen de manifiesto las disparidades a la hora del acceso a la educación a lo largo y a lo ancho de nuestro país, especialmente en las zonas rurales. Sin embargo, también se activan diversas organizaciones que trabajan convencidas de que la educación es un derecho inalienable y que debe cumplirse para todos por igual. “Voy con Vos” es una de ellas: es una Asociación Civil que, desde 2007, trabaja para que niños y jóvenes de diversos parajes rurales de Chaco puedan acceder a una mejor educación.
Los estudios reflejan que además de la gran disparidad regional en la oferta de educación rural, la distribución también evidencia grandes desigualdades de acuerdo al nivel: en el nivel primario, la matrícula rural representa un 13% del total, en el nivel inicial baja a un 10% y en el nivel medio alcanza apenas al 7%. Según la Red Comunidades Rurales, no se trata de falta de jóvenes, sino falta de oferta. Esa falta de oportunidades en sus zonas de origen son las que obligan a los jóvenes a emigrar a las ciudades o sus periferias. Asimismo, la falta de educación los deja excluidos o en situación de vulnerabilidad a la hora de conseguir empleo.
La realidad nos muestra que están registradas sólo 4800 escuelas rurales de nivel medio, aunque para el nivel primario existen 11.726. Resulta paradójico que, aunque el sector agropecuario produce alrededor del 40% del PBI de nuestro país, la inversión en la educación de nivel medio rural sólo representa un 0,2% del presupuesto educativo nacional. Otro dato sumamente ilustrativo que se desprende de un estudio realizado por la misma Red, es que generalmente existe una gran distancia entre las escuelas rurales primarias y las de media: en promedio, 26 kilómetros separan a unas de otras, trepando a un promedio de 37 kilómetros en la zona de la Patagonia.
Aquellos que han sido consultados al respecto coinciden en que son las distancias, la falta de infraestructura y el deficiente (y en ocasiones inexistente) transporte público los principales limitantes para que los jóvenes puedan acceder a sus estudios secundarios. Las escuelas agropecuarias con internados están disminuyendo drásticamente, ya sea por falta de recursos, ya por problemas sociales.
Tomás Montemerlo, Director de Programas de la Asociación Civil “Voy con Vos”, en la charla que brindó en el marco del pasado evento VAMOSAZOOMAR -la Iniciativa de TECHO y Familia Bercomat-, recuerda que la primer experiencia que tuvieron, becando cuatro adolescentes, tuvo un bajo índice de efectividad en su primer año: “Con 12 o 13 años, los chicos se iban a vivir a una residencia o a la casa de un familiar y nosotros estábamos en Buenos Aires, a 1200 km de donde todo esto sucedía. Entre los voluntarios nos organizábamos para estar presentes 4, 5 veces al año” pero ese seguimiento a distancia no fue suficiente, no resultó efectivo. Por lo cual, optaron por un régimen de tutorías que les permitió dar un gran salto cualitativo en su programa. “Lo más importante es el trabajo que hacen las tutoras: es estar presentes cada día, para acompañar a los chicos en esta nueva vida, para que puedan transitar la escuela secundaria, hasta terminarla. Las becas no vienen a ser un premio, las becas son una oportunidad que le queremos dar a cada chico que termina séptimo grado, esa es nuestra manera de visibilizar las comunidades rurales donde trabajamos.”
Pese a que ya en 2010 El Consejo Federal de Educación había manifestado como ítem pendiente el encontrar el modo de que “todos puedan ir a la escuela allí donde viven”, muy poco cambió desde entonces. Por ello, donde el Estado está ausente, es fundamental el apoyo de la comunidad en su conjunto. Y qué mejor que el inicio de las clases como excusa para conocer más sobre el trabajo de Organizaciones de la Sociedad Civil como “Voy con Vos” que ven a la educación como un factor esencial para lograr la igualdad de oportunidades, y como herramienta para promover ciudadanos activos, con plena consciencia de sus derechos y sus obligaciones.
Pueden conocer más sobre “Voy con vos” y cómo colaborar en su web http://voyconvos.org/ y pueden escuchar la charla brindada por Tomás Montemerlo en https://www.vamosazoomar.org/charlas
Los estudios reflejan que además de la gran disparidad regional en la oferta de educación rural, la distribución también evidencia grandes desigualdades de acuerdo al nivel: en el nivel primario, la matrícula rural representa un 13% del total, en el nivel inicial baja a un 10% y en el nivel medio alcanza apenas al 7%. Según la Red Comunidades Rurales, no se trata de falta de jóvenes, sino falta de oferta. Esa falta de oportunidades en sus zonas de origen son las que obligan a los jóvenes a emigrar a las ciudades o sus periferias. Asimismo, la falta de educación los deja excluidos o en situación de vulnerabilidad a la hora de conseguir empleo.
La realidad nos muestra que están registradas sólo 4800 escuelas rurales de nivel medio, aunque para el nivel primario existen 11.726. Resulta paradójico que, aunque el sector agropecuario produce alrededor del 40% del PBI de nuestro país, la inversión en la educación de nivel medio rural sólo representa un 0,2% del presupuesto educativo nacional. Otro dato sumamente ilustrativo que se desprende de un estudio realizado por la misma Red, es que generalmente existe una gran distancia entre las escuelas rurales primarias y las de media: en promedio, 26 kilómetros separan a unas de otras, trepando a un promedio de 37 kilómetros en la zona de la Patagonia.
Aquellos que han sido consultados al respecto coinciden en que son las distancias, la falta de infraestructura y el deficiente (y en ocasiones inexistente) transporte público los principales limitantes para que los jóvenes puedan acceder a sus estudios secundarios. Las escuelas agropecuarias con internados están disminuyendo drásticamente, ya sea por falta de recursos, ya por problemas sociales.
Tomás Montemerlo, Director de Programas de la Asociación Civil “Voy con Vos”, en la charla que brindó en el marco del pasado evento VAMOSAZOOMAR -la Iniciativa de TECHO y Familia Bercomat-, recuerda que la primer experiencia que tuvieron, becando cuatro adolescentes, tuvo un bajo índice de efectividad en su primer año: “Con 12 o 13 años, los chicos se iban a vivir a una residencia o a la casa de un familiar y nosotros estábamos en Buenos Aires, a 1200 km de donde todo esto sucedía. Entre los voluntarios nos organizábamos para estar presentes 4, 5 veces al año” pero ese seguimiento a distancia no fue suficiente, no resultó efectivo. Por lo cual, optaron por un régimen de tutorías que les permitió dar un gran salto cualitativo en su programa. “Lo más importante es el trabajo que hacen las tutoras: es estar presentes cada día, para acompañar a los chicos en esta nueva vida, para que puedan transitar la escuela secundaria, hasta terminarla. Las becas no vienen a ser un premio, las becas son una oportunidad que le queremos dar a cada chico que termina séptimo grado, esa es nuestra manera de visibilizar las comunidades rurales donde trabajamos.”
Pese a que ya en 2010 El Consejo Federal de Educación había manifestado como ítem pendiente el encontrar el modo de que “todos puedan ir a la escuela allí donde viven”, muy poco cambió desde entonces. Por ello, donde el Estado está ausente, es fundamental el apoyo de la comunidad en su conjunto. Y qué mejor que el inicio de las clases como excusa para conocer más sobre el trabajo de Organizaciones de la Sociedad Civil como “Voy con Vos” que ven a la educación como un factor esencial para lograr la igualdad de oportunidades, y como herramienta para promover ciudadanos activos, con plena consciencia de sus derechos y sus obligaciones.
Pueden conocer más sobre “Voy con vos” y cómo colaborar en su web http://voyconvos.org/ y pueden escuchar la charla brindada por Tomás Montemerlo en https://www.vamosazoomar.org/charlas
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