Hoy se arma el tradicional arbolito de Navidad

Como cada 8 de diciembre, los cristianos de todo el mundo se disponen a armar el tradicional árbol de Navidad, uno de los símbolos más representativos de la festividad.

Sin embargo, pocos conocen su significado real y las tradiciones en torno a la variedad de adornos a elegir.

Son varias las leyendas que explican el porqué de la fecha y el significado del arbolito para las distintas culturas. Tal es el caso de la cultura nórdica que explica que la sociedad Celta solía adorar con un árbol todos los 8 de diciembre el nacimiento de Frey, dios del sol y la fertilidad.

Luego, con la llegada del cristianismo, tal celebración se ajustó al nacimiento de Cristo. En aquellos tiempos, el árbol representaba para el cristianismo el amor de Dios y la vida eterna, mientras que su forma simbolizó la Santísima Trinidad.

Asimismo, la costumbre de colocar presentes al pie del árbol y abrirlos en Navidad también proviene de los celtas, quienes se repartían las antorchas como augurio de pronto verano.

El arbolito también significa el Universo, la prosperidad, la vida, siembra y cosecha. Se estima que en Belén, la gente ponía en el árbol algún objeto preciado a modo de obtener buenas compensaciones para el año entrante.

En relación a los adornos o esferas de colores, trascendió que originalmente eran manzanas que recuerdan el paraíso donde Adán y Eva cometieron el pecado original. En tanto, las lucecitas simbolizan la luz de Cristo, mientras que los lazos y guirnaldas representan la unión de las familias y personas queridas.

En cuanto a la fecha elegida, esta tiene especial significado para los cristianos dado que el 8 de diciembre de 1854, en su bula Ineffabilis Deus, el papa Pío IX proclamó que María, madre de Dios fue preservada del pecado original desde el primer instante de su existencia. En ese marco, el armado del árbol se corresponde con el Día de la Virgen Inmaculada Concepción.

En el caso de Argentina, en el país la tradición de armar el arbolito comenzó en 1807, cuando un irlandés inmigrante trasladó las costumbres de su país y decoró un pino en una plaza pública.