Un misionero, el comandante del vuelo más largo del mundo

Domingo 6 de agosto de 2017 | 07:47hs.
Javier Maluf ahora quiere pilotear los nuevos Boeing 777.

La ruta aérea entre Qatar y Nueva Zelanda sufrió modificaciones por las restricciones impuestas recientemente al país asiático, por lo que el vuelo diario que conecta las ciudades de Doha y Auckland se prolongó alrededor de dos horas, lo que lo convierte en el más largo del mundo.

Esta información merecería ser incluida en la sección internacional de no ser por la participación del piloto misionero Javier Maluf, quien el viernes por primera vez comandó el recorrido que se extendió por 18 horas y 7 minutos.


Al hijo dilecto del Aeroclub Posadas le tocó ser comandante entre los cuatro pilotos del vuelo 921 de Qatar Airways que partió desde la ciudad neozelandesa más importante y recorrió 15.750 kilómetros con 219 pasajeros a bordo, para lo cual consumió 163 mil litros de combustible.

"Hace diez años que estoy en la compañía más importante del mundo y tuve la suerte de hacer este viaje. Son 24 horas de trabajo desde que me pasan a buscar y hasta después del aterrizaje", contó en diálogo con El Territorio desde su casa en la capital qatarí.

Por supuesto que ningún piloto está sentado frente a los comandos durante todo el recorrido, pero el comandante es responsable de todo lo que ocurra en la aeronave, en este caso un Boeing 777-200-LR, de lo más moderno en el ámbito aerocomercial y con más de 20 horas de autonomía.

"Mi siguiente desafío es pilotear los nuevos 777, la empresa encargó unos cien y los primeros llegarían en 2020. Tendrán menos componentes metálicos, por lo que se reduce el peso y ganaría en autonomía. Me gustaría comandar un vuelo más largo si surgiera", señaló.

Cuatro vuelos al mes

Maluf relató que un viaje de tamañas dimensiones implica dos días de descanso en destino y otros dos en el regreso antes de volver a estar en funciones. Un piloto que realiza este tipo de rutas completa en alrededor de cuatro vuelos el máximo de 90 horas mensuales.

"Cuesta acostumbrarse al jet lag, depende de cada organismo. Al principio me tocaba ir a Estados Unidos, llegábamos a la tarde, me acostaba a dormir y me despertaba a las 3 de la mañana. Pero con el tiempo me acostumbré, con ejercicio y comiendo poco en la cena para dormirme más rápido", expuso.
Maluf adelantó que hacia fines de mes estará en Misiones y brindará charlas en el Aeroclub Posadas.