Por una medida oficial, será más barato comprar en un solo pago

Domingo 22 de enero de 2017 | 01:00hs.

El Gobierno publicará en los próximos días una resolución que obligará a los comercios minoristas a diferenciar el pago contado del precio financiado o los pagos en cuotas. La idea del Ministerio de Producción y empresarios del sector y representantes de las tarjetas de crédito, es que el precio sea uno, y haya un recargo (costo financiero) si se opta por la financiación.

 

La intención del Poder Ejecutivo es que se “sinceren” los precios del consumo masivo de la economía y se abaraten los productos.

 

Esta resolución surge a partir del análisis de casos del mercado de tarjetas de crédito realizados por la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC), un organismo que depende del ministerio de Producción. En esos estudios concluyeron que el financiamiento de los plásticos distorsionaba los valores finales que pagaban los consumidores.

 

Cabe recordar que las tarjetas de crédito le cobran una comisión de intermediarios a los comerciantes y cadenas por utilizar el servicio. Además, les sugieren las tasas de interés para el financiamiento a sus clientes.

 

La expectativa es que los precios que se abonan al contado sean “más accesibles” y caigan, a la vez que desaparezcan los descuentos por comprar una segunda unidad, un mecanismo habitual en los supermercados. El objetivo de fondo es que se reduzcan los niveles de inflación, que el año pasado alcanzó una cota histórica al registrar un acumulado del 40%.

 

Se espera que la iniciativa tenga un impacto visual en las góndolas y stands de cadenas de electrodomésticos. La intención que haya una cartelería específica en la que se discrimen los precios con y sin financiamiento. En lo que respecta a los pagos en cuotas, los comercios estarán obligados a informar el costo financiero.