“Dijo ser el papá del que apretó el gatillo, nos pidió perdón y se lo dimos”

Viernes 24 de junio de 2011

“Pudimos hablar con el padre del chico que cometió el crimen y decirle que le perdonábamos, que desde nuestro punto de vista seguramente habrá hecho una buena tarea como padre y que ninguno cría a su hijo como un asesino”, aseguró Daniel Vega, padre de Lucas Vega, el joven que fue asesinado de un balazo en el rostro el domingo 12 de junio cuando salía de un boliche y fue asaltado por dos menores. El estremecedor y sanador encuentro entre Vega y el policía federal tuvo lugar el miércoles, luego de la rueda de reconocimiento en el juzgado de Menores, y selló una etapa más dentro de la causa en la que se espera el avance legal de la misma en la que los acusados, de 14 y 15 años, más allá de ser hallados responsables, serán liberados.
Además de la investigación penal, por la que los sospechosos aunque sean hallados responsables no quedarán presos, el Juzgado y la Fiscalía de Instrucción Siete seguirán con la causa al padre del menor acusado, propietario del arma de fuego con la que se cometió el crimen, para saber si tiene alguna responsabilidad por lo ocurrido.

 

El perdón
El Territorio dialogó con Daniel Vega, quien es pastor de una iglesia cristiana y que, desde el día del hecho pidió que se difunda el caso para que se resuelva, para que no vuelva a ocurrir y que luego, hasta en los peores momentos, pidió por la familia de los acusados.

Sobre la causa dijo que “Lo que queda es esperar el avance de la investigación del juez Jiménez, donde van a ver hasta qué grado de violencia se les va a culpar y más que nada para analizar el tratamiento a los menores, porque después de los trámites legales el Juez me dejó bien en claro que no los pueden retener mucho tiempo en la cárcel y los van a soltar”.
“Nosotros estuvimos con el papá del chico ayer -por el miércoles-, en el día del reconocimiento. Tuvimos una charla en privado con él y mi esposa. Y le quitamos el peso de la culpa por lo que implica la falta del perdón”, relató Daniel.
Y siguió: “Hablamos de lo que nos pasó y desafortunadamente a nosotros nos toca estar de este lado y a él del otro lado. Hicimos lo que todo cristiano predica, pero que resulta muy difícil llevar a la práctica. Después hablamos de encontrarnos cara a cara con su hijo, pero eso va a ser más difícil. Será más que nada cuando salga en libertad, porque hasta existe la posibilidad de darle ayuda en sentido espiritual”.
El día del entierro de Lucas en Parque Tierra de Paz, el lunes 13, el pastor José María Abraham, capellán presidente en toda la Argentina, se refirió a la familia de los jóvenes acusados de asesinar a Lucas y recordó el “don del perdón, porque las familias de ellos deben estar también sufriendo por lo que los hijos hicieron”.
Ayer Daniel, aún emocionado y con un gran dolor a la vez, detalló lo que habló con el padre del sospechoso: “él se identificó como el papá del que apretó el gatillo empezó a decirnos que estaba mal, que esto no tiene una explicación, que no sabe cómo pasó, que nos vio por los medios, buscó información y sabiendo que habíamos hablado del perdón decía que lo perdonemos. Y le declaramos el perdón. El dolor en nuestro corazón sigue, te parte en el alma. Estela, como mamá, lo sigue esperando, ella tenía su relación con él y también eso genera mucho dolor. Pero sabemos que a veces es fácil hablar y predicar ciertas cosas, pero cuando te toca hacer lo que predicamos no lo hacés. Sería fácil enojarse, pero si yo reacciono o busco alguien que reaccione con violencia, estamos generando más agresión. Dios nos trajo desde La Plata para mostrar cosas diferentes y a pesar de lo que pasó sabemos que Dios no nos trajo en vano, que podemos mostrar un mejor camino”.
“Uno puede practicar mucho la palabra de Dios, pero nadie está preparado para perder un hijo”, aseguró el papá de Lucas, que con su familia lucha por seguir su camino.

 

Posible marcha
Daniel Vega manifestó ayer que él, sus familiares y amigos, están planeando realizar una marcha “solicitando mayor seguridad en la ciudad. No tiene fecha todavía, la vamos a hacer con tranquilidad y tiempo para informar a la gente que se ha dispuesto, requiere trabajo. Nosotros sabemos que no se puede poner un policía en cada esquina, pero sí que se pueden cambiar muchas cosas desde la estructura y organización”.
“Yo quiero destacar la labor del comisario Walter Britez y la comisaría Tercera, que me dejó sin palabras por la rapidez y la eficiencia con la que trabajaron”, remarcó Vega. Además, según contó, ayer charló con el Gobernador de la provincia en el Hospital Madariaga y hoy sería recibido por él en su despacho para tratar la problemática de la juventud y la delincuencia.

 

 

El crimen por no tener un celular

El homicidio fue el domingo 12 de junio a las 5.45 en avenida López Torres, luego de que el joven Vega saliera de un local bailable de avenida Cabred.
Él se dirigía hacia la parada de colectivos con su novia y dos jóvenes, uno con arma en mano, le pidieron un celular y dinero. Como no tenía lo que le pidieron, sufrió un disparo en la cara que le provocó una lesión irreparable en el cerebro y la muerte, a las 22 de ese mismo día.
En esta causa fue el mismo padre del acusado, un policía federal, quien dijo a los investigadores que después de leer la crónica de El Territorio publicada el lunes, se dio cuenta que su hijo, de 15 años, le había robado el arma 9 milímetros durante algunas horas, y lo entregó.