“SE TRATA DE VENCER LOS MIEDOS”

Viernes 17 de febrero de 2017

“Desde el punto de vista racional, subirse al ring no es una situación agradable. Yo antes decía ‘esto es de animales’, pero después entendí que se trata de poder vencer los miedos. El miedo a lo que te van a decir por ser mujer, a que te lastimen, a perder”.
Con estas palabras, Yamila Romanini contó cómo fue cambiando su visión sobre el boxeo y este deporte generó un cambio interno en su vida.
Yamila nació hace 33 años en Buenos Aires, pero hace once vino a visitar a su padre a Misiones y se enamoró de la tierra colorada. Tal fue el idilio que la visita la llevó a tomar la decisión de arrancar una nueva vida en esta provincia.

Comenzó a estudiar el profesorado de psicología y, además, se metió en el mundo del boxeo, un deporte que también la enamoró desde un principio y que hoy es una de sus principales actividades.
Yamila arrancó a entrenar hace cinco años en la escuela de Rubén Verdún, luego pasó por un gimnasio en San Ignacio, localidad a la que viajaba varias veces a la semana sólo para entrenar, y desde hace algunos meses ella misma da clases de boxeo en un gimnasio ubicado sobre la avenida Uruguay de la capital provincial.
“Siempre hice deportes, pero nunca me animaba al boxeo porque si le llegaba a decir a mi papá me mataba”, reconoció la pugilista que hasta el momento cuenta con una sola pelea disputada ante Andrea “La China” Mascareño, a quien le ganó por puntos.
Pero además de su faceta como deportista, Yamila tiene otras responsabilidades que le demandan tiempo y energías. ¿Cómo hacer para repartir las horas del día entre ser profesora de psicología y ciencias de la educación en dos escuelas, dar clases de boxeo en un gimnasio, ser instructora de cardio jump en el club Capri y, también, y quizá lo más importante, tener tiempo para su familia? Ella tiene la respuesta: la organización.
“Todo esto me encanta. Lleva mucha planificación y organización, pero me encanta. Desde febrero empiezo a planificar lo que van ser las clases de boxeo y de la escuela. Tengo que tener todo bien organizado para poder hacer todo”, aseguró.

Télefono para Natalia
El gran objetivo de este año para Yamila es poder concretar una pelea con Natalia Verdún, la hija de su ex entrenador y una vieja conocida. “Para este año el gran objetivo es poder concretar una pelea con Natalia Verdún.
“Cuando yo entrenaba en la escuela de su papá habíamos hablado para hacer una exhibición, pero después no se terminó dando porque yo no estaba del todo preparada y quedó pendiente.Desde el 2015 estoy esperando. Ya me preparé fuerte dos veces pero todavía no salió porque no había comisión de boxeo. Ahora que se formó la Comisión espero que se dé y que pueda salir algo lindo”, se esperanzó Romanini.
El hecho de poder llevar adelante todas sus actividades la convierte a Yamila en una verdadera mujer multifacética. Al momento de establecer sus prioridades, ella reconoce que lo más importante es su trabajo como instructora. “Lo importante para mí es brindar un buen entrenamiento. Que sea bien aeróbico para los que quieran perder peso y que permita, sobre todas las cosas, fortalecer el cuerpo. Ese es el objetivo del boxeo”, avisó.
“Es una descarga de energía increíble y además previene muchas enfermedades. Uno se acerca por una cuestión física, pero después te das cuenta que va más allá de eso porque en definitiva la idea es vivir sano. Es un trabajo interno y en el cual se requiere mucha disciplina. Yo estoy todos los días en el gimnasio”, se explayó Yamila luego de terminar de dar una de sus clases junto a su grupo de alumnos, integrado por mayoría de mujeres.
Justamente el boxeo es una disciplina que en los últimos años creció considerablemente en la rama femenina, una situación que hace algún tiempo atrás era poco común al tratarse de una actividad tan relacionada a los hombres. Al respecto, Yamila dijo que “en mi familia a la faceta de boxeadora la tengo un poco escondida. Una de las expresiones más comunes de mi papá es ‘más feo que boxeadora’. Porque para él es un deporte muy masculino. El sueño de mi papá es que yo esté en la facultad. Yo tengo el título universitario para ser profesora en la facultad, pero estoy haciéndolo como instructora de boxeo”, contó con un toque de humor.
Para finalizar, la pugilista destacó la importancia de realizar un buen entrenamiento en el aspecto físico de las personas. “Lo mejor que tiene el boxeo es el entrenamiento.Trabajás fuerza, velocidad, potencia. Si te cuidás un poquito cuando salís de acá tenes que ver los resultados”, cerró.

“Me gustaría llevar el boxeo a las escuelas”En su doble faceta de deportista y docente a Yamila le nacen ideas para conjugar las dos cosas y una de ellas es poder llevar el boxeo a las escuelas porque considera que mediante esta disciplina los chicos pueden adquirir una conducta para su vida cotidiana. “Yo quiero llevar el boxeo a las escuelas porque es un deporte que les ayuda a construir el carácter. Requiere mucho trabajo y esfuerzo y gracias a eso te vas superando. En vez de que estén peleando afuera del colegio, que vengan y se saquen las ganas en el gimnasio”, argumentó la pugilista que además viaja cada tanto a Buenos Aires porque está realizando el curso de capacitación para ser técnica de boxeo.