El circo fantástico y el enamorado maldecido

Lunes 28 de septiembre de 2009
En escena. | Los actores pasearon su histrionismo por senderos humorísticos y sarcásticos.
Un espectáculo teatral sumamente recomendable ofrece el grupo de teatro local Laberintos que presentó una nueva función del Freak Show, el sábado por la noche en el Centro Cultural Cidade. Los cuatro actores pasearon su histrionismo con acierto y sin dar respiro durante una hora y media, por senderos humorísticos y a veces sarcásticos, de una amenísima obra escrita por el joven dramaturgo Martín Giner.
“Toda obra de teatro - decía el recordado Rulo Fernández - no es más que un cuentito bien contado, con patadas en la frente del espectador a cada minuto”. Y aquella concisa definición, tan exenta de academicismos, tan cierta, viene hoy de perillas para aplicarla a este Freak Show de Laberintos. Respaldados en la solidez del vestuario (Paula Marzana), la escenografía (Mariano Bernachea), la iluminación (Guillermo Bejuk y Ángel Martínez), el sonido (Gustavo Leumann y Armando Ortellado), y otros efectos, los personajes se descarnan de los actores y logran imponer su corporeidad rápidamente, tomando el crédito que la fe poética del espectador les ofrece, entre carcajadas o silencios, entre aplausos espontáneos celebrando escenas o acaso reflexionando sobre el mediático exhibicionismo moderno de otros sucesos freaks.
El Freak Show comienza desde el momento en que el espectador está haciendo la fila esperando que se dé sala, a que se le libere el acceso a las butacas. Al rato, en la más absoluta oscuridad, un siniestro presentador de capa roja y galera negra, (José María Barrios Hermosa) y su partenaire, una bella y festiva asistente  (Casandra Viera) van introduciendo a la platea en el trágico espectáculo circense –como es el exhibir a un condenado, romántico entomólogo (Andrés Dutra) a cumplir la patética maldición de morir en plena escena al enamorarse de la angelical y seductora Josefina (Silvina Warenycia) - y lo hacen con la misma morbosidad con que antaño se exhibían en los circos mujeres barbudas, cíclopes, enanos encadenados, contorsionistas, y otros fenómenos teratológicos asombrosos.
De allí, el nombre de esta obra, que viene a sumarse al buen momento actoral de Laberintos (Terapia, Como si fuera esta noche, 30 pastillas) firme candidato en el próximo Festival de Teatro Provincial de Iguazú, donde mostrarán su Freak Show.