Los hospitales cuentan con suero antiofídico

Domingo 21 de enero de 2018
Misiones lidera el registro de accidentes con ofidios en el país, le sigue Santiago del Estero. Por esta razón, desde el Programa de Animales Venenosos de Salud Pública realizan regularmente la capacitación a médicos y personal de salud para poder atender en tiempo y forma a un paciente que ingresa picado por una serpiente venenosa.
A la vez, todos los hospitales de nivel II cuentan con acceso a los antídotos, que son específicos para tratar las lesiones ocasionadas por cada especie de ofidio. 
El director del área, docente e investigador Roberto Stetson señaló a El Territorio que en Misiones y sobre todo en la zona centro y norte, “tenemos tres especies muy venenosas, la yarará, coral y cascabel, estás dos últimas son más peligrosas aunque la mordedura es menos frecuente, el veneno de la coral y la cascabel afecta al sistema nervioso central y contiene toxinas neurotóxicas, por lo que actúa afectando varios órganos”.
Sostuvo que “en el país, el Instituto Malbrán es el que elabora los sueros antiofídicos y cada hospital puede tener en reserva o puede pedir a la cartera sanitaria cuando se presenta un caso, el acceso a los sueros está garantizado y es gratuito para la persona que sufrió la picadura”. 
Consultado acerca de la evolución de una persona que sufrió la inoculación del veneno de una cascabel, como fue el caso del joven de San Pedro que permanece internado en el Hospital Samic de Eldorado, dijo que tratada en tiempo y forma, “la persona se cura y no suele haber secuelas, pero el diagnóstico y el tratamiento debe ser oportuno dentro de las seis horas, y se debe dar el suero específico y en tres dosis”, indicó.
En la provincia durante 2017 se denunciaron 240 casos de accidentes con ofidios, el 96 por ciento corresponde a mordeduras de yarará, el 3 por ciento a cascabel y el uno por ciento a coral. 
La mayoría de los accidentes tienen lugar en la zona rural y son víctimas personas que realizan tareas de cultivo y limpieza de chacras. 
Por ello, recomendó tomar todas las medidas de cuidado al realizar trabajos en zona rural con pasturas altas, mucha arboleda o en depósito y lugares por los que no se circula mucho.
“Hay que usar botas, camisas manga larga, guantes y tratar de no meter la mano en lugares donde no se puede ver como el interior de un tronco o abajo de maderas que están en el mismo lugar hace tiempo”.

Las soberbias yararás
Los encuentros con ofidios venenosos más frecuentes son con la especie yarará, “esto puede ser porque habita en toda Misiones, hasta el sur tenemos la yarará, cuando la coral y la cascabel están desde el centro al norte, otra cuestión es que la yarará -que quiere decir altiva y soberbia- es más agresiva y si se siente en peligro ataca, mientras que la cascabel suele advertirnos de su presencia y no suele atacar, los accidentes se dan si se produce por no verla algún roce o si se la pisa”.