Adentrarse en el mundo natural de Las Yungas

Domingo 12 de marzo de 2017
Calilegua constituye el ambiente de mayor biodiversidad del país junto con la selva paranaense, en Misiones.
El Parque Nacional Calilegua fue creado en el año 1979 con el fin de preservar un área representativa de la selva, también conocidas como “yungas”. El mismo constituye el ambiente de mayor biodiversidad del país junto con la selva paranaense, en Misiones.
Este parque es la muestra protegida más extensa de la Selva de las Yungas, y su vasta diversidad de formas de vida incluye árboles que superan los 40 metros de altura, espectaculares orquídeas, especies en peligro de extinción y otras peculiaridades que atraen visitantes de todo el mundo.
Calilegua es el único parque nacional de la provincia de Jujuy y su superficie de 76.306 hectáreas lo convierte en el área protegida más grande en nuestro país dedicado a la conservación de las selvas tropicales de montaña. El acceso es gratuito.
Dentro del parque, varios senderos de baja, media y alta dificultad permiten adentrarse en la cultura del pueblo guaraní, así como explorar la espesura selvática y conocer los arroyos que bajan de los cerros.
Desde el pedemonte hasta las alturas, cinco senderos regalan vistas asombrosas a través de diversos pisos de la vegetación yungueña.
En la zona de Aguas Negras, a la entrada del parque, se pueden visitar el Sendero Intercultural Nuestra Selva y la Casa Guaraní, además del Sendero La Herradura y el Mirador del Río San Lorenzo.
Al comenzar a subir, en el gradiente de la selva también se pueden transitar los senderos pedestres La Lagunita, Tataupá y La Junta y la bicisenda El Tapir.
En lo más alto del cerro Amarillo (3.646 metros), que es a su vez la altura máxima de todo el Parque Nacional, yacen ruinas cuyo origen es aún hoy discutido por los especialistas y la tradición local.
Para alcanzar esa zona es necesario remontar el camino que une los pueblos de San Francisco y Alto Calilegua y escalar el cerro, de bajas implicancias técnicas pero con alta demanda física.

Humahuaca
Es posible unir Calilegua con la Quebrada de Humahuaca a través de una travesía que requiere varios días y en su recorrido pasar por pueblitos perdidos entre las montañas, vestigios arqueológicos y majestuosos paisajes de fondo, enlazando así los corredores turísticos más visitados de la provincia.
Para estas últimas dos actividades es necesario recurrir a guías, servicio sobre el cual el visitante puede informarse en la Intendencia del parque.
Para quienes prefieran pasar una jornada distendida, Calilegua cuenta con un sector de camping libre, otro agreste con sanitarios, fogones, mesadas y proveeduría, un área de recreación y atención permanente del personal del área protegida.
Varias son las formas en la que se lo puede recorrer: a través de excursiones, guías locales o por cuenta propia; a pie, en bicicleta o en auto, por la Ruta Provincial 83, cuyo sinuoso trayecto atraviesa el área protegida.
Además, existe un colectivo que parte a la mañana desde la vecina localidad de Libertador San Martín rumbo a Valle Grande, que tiene paradas en el parque y regresa por la tarde.
Las Sierras de Calilegua, de unos 20 millones de años de antigüedad, interrumpen los vientos provenientes del Atlántico que dejan allí su humedad, lo que dio origen a la espesa cobertura vegetal de sus laderas repletas de árboles, arbustos, lianas, enredaderas, helechos y bromelias.
Estas peculiares condiciones generan que nunca falte el agua en los arroyos que bajan de las sierras al Valle de San Francisco, abasteciendo sus plantaciones de cítricos, paltas y caña de azúcar.
Respecto a la flora y fauna que alberga el parque, conviven allí más del 37% de las especies de árboles de Argentina, más del 30% del total de mamíferos y unas 350 especies de aves, que superan el 35% de las presentes en el país.
Entre las especies en peligro que la habitan, se destacan el yaguareté -se estima que alberga una de las pocas poblaciones que persisten en territorio nacional-, el águila poma, el palo blanco y la taruca, declarada también Monumento Natural Nacional, máxima categoría de protección que puede otorgarse a una especie.