Acusaron a Temer de pujar por frenar la pesquisa del Lava Jato

Sábado 20 de mayo de 2017
La población se manifestó para exigir el apartamiento del mandatario.

La Fiscalía General de Brasil acusó al presidente Michel Temer de intentar frenar el avance de la Operación Lava Jato, que indaga el pago de sobornos en Petrobras, en un pedido de investigación cursado al Superior Tribunal Federal (STF) que fue revelado el viernes. Según el documento, Temer habría actuado en coordinación con Aécio Neves, candidato presidencial en 2014, que este jueves fue suspendido tanto de su mandato en el Senado como de la presidencia del partido de centroderecha Psdb.
“Se verifica que Aécio Neves, en articulación, entre otros, con el presidente Michel Temer, buscaron impedir que avancen las investigaciones de Lava Jato, sea por medio de medidas legislativas o por medio del control de nombramientos de los funcionarios o de los comisarios de la policía que conducirían las investigaciones”, señala el texto.
“De esta manera, se vislumbra igualmente la posible práctica de crimen de obstrucción a la Justicia”, concluye. Las acusaciones se realizan en base a las delaciones premiadas de ejecutivos del gigante mundial de la alimentación JBS.

Brasil vive en estado de conmoción política desde que el miércoles por la noche el diario O Globo revelara el contenido de una conversación entre Temer y uno de los dueños de JBS, Joesley Batista, en la que el mandatario parece concordar con el pago de un soborno para comprar el silencio del ex diputado Eduardo Cunha, que purga una pena de quince años de cárcel por corrupción. Temer fue criticado por no haber denunciado a Batista por sus confidencias ilegales. El jefe de Estado de 76 años rechazó tajantemente esas acusaciones, así como los llamados a que presente su renuncia. El STF abrió el jueves una investigación sobre el caso. El pedido de la Fiscalía divulgado ayer podría acentuar considerablemente la presión sobre Temer.

Corrupción
El acosado gobierno brasileño empezó ayer a cuestionar tanto la legalidad como el contenido de una grabación que presuntamente sorprendió al presidente  Temer apoyando el pago de dinero a un ex legislador para mantenerlo callado.
La aparente estrategia defensiva viene en medio de una investigación de sobornos por valor de miles de millones de dólares en la que han caído políticos influyentes y cuando se multiplican los llamados a la renuncia del Presidente.
“Michel Temer no cree en la veracidad de las declaraciones” en la grabación, dijo la Presidencia en un comunicado. Este hace notar que la persona que efectuó la grabación, Joesley Batista, directivo de la empresa empacadora de carne JBS, está siendo investigado y quiso “aprovechar” la situación.
La grabación fue entregada a los fiscales como parte de un acuerdo con Batista para reducir su posible sentencia. La prensa local informó que Temer planeaba mandar a analizar el audio, cosa que la presidencia se negó a confirmar.  
La Corte Suprema abrió una investigación sobre las acusaciones contra Temer y levantó el sello con respecto a la grabación. Globo publicó entonces los casi 39 minutos de grabación, de mala calidad y con frecuencia inaudible. En ella se puede escuchar a dos hombres hablando sobre Cunha. Según Globo se trataría del Presidente y Joesley Batista, ejecutivo de la compañía empacadora de carne JBS.
Un hombre, al parecer Temer, se queja que Cunha podría ponerlo en una situación embarazosa. “Dentro de mis límites, yo hice ahí lo más que pude. Arreglé todo”, responde el otro hombre, al parecer Batista. “Él vino y cobró. Estoy bien con Eduardo ¿OK?”. El primer hombre dice entonces: “Tienes que continuar con eso ¿ves?”. El segundo responde: “Cada mes”.En un mensaje a la nación el jueves, dijo en tono desafiante que la Corte Suprema lo declararía inocente en su investigación sobre las acusaciones de que respaldó una trama para pagar sobornos a un influyente ex legislador encarcelado por corrupción. 
 El real brasileño se recuperó ayer con una suba de 4,12 por ciento y cerró a 3,256 unidades por dólar, tras derrumbarse en la víspera por una crisis política desatada por una investigación de corrupción sobre  Temer. El jueves, la moneda se derrumbó 7,7 por ciento, a 3,390 unidades por billete verde, su peor valor desde diciembre de 2016.
Ayer a la noche, una protesta de varias miles de personas en Río de Janeiro fue dispersada cuando enmascarados lanzaron objetos a la policía que respondió con gases lacrimógenos. “El gobierno argentino sigue con expectativas el             desenlace de la crisis política en Brasil, preocupado además por las consecuencias económicas que pueda ocasionar el temblor en su principal socio comercial”, admitió  la canciller Susana Malcorra.

Multitudinarias protestas
En San Pablo, la ciudad más poblada del país, cientos de manifestantes se reunieron ayer en la avenida principal para exigir la renuncia de Michel Temer. Desde su inicio hace tres años, la operación “Autolavado” sobre las tramas de sobornos en Petrobras reveló un nivel de corrupción que sorprendió incluso a los brasileños más escépticos y llevó a prisión a varios empresarios y políticos de alto perfil.
Se presentaron al menos ocho proyectos de juicio político hasta el momento en el Congreso y se multiplican los llamados de todos los sectores para que renuncie.
Ayer se sumó al debate sobre el tema el ex presidente del Supremo Tribunal Federal, Joaquim Barbosa.
“No hay otra salida: los brasileños deben organizarse, salir a las calles y exigir con fuerza la renuncia inmediata de Michel Temer”, aseveró el que se desempeñara como magistrado.