Histórica redada antinarco culminó con políticos y uniformados presos

Miércoles 15 de marzo de 2017
El intendente de la ciudad correntina de Itatí, Natividad ‘Roger’ Terán, su vice, Fabio Aquino, y el jefe de la comisaría local, Diego Ocampo Alvarenga, fueron detenidos ayer en el marco de una megacausa de narcotráfico iniciada en mayo de 2014 en Buenos Aires.
Fuentes de la investigación indicaron que los tres fueron apresados en sus respectivos domicilios y alojados en dependencias del Escuadrón 48 Corrientes de Gendarmería Nacional Argentina (GNA).
Los imputados serían trasladados a la Capital Federal para ser indagados por el magistrado Sergio Torres, titular del porteño Juzgado Federal Doce, a cargo del expediente que comenzó hace más de tres años y terminó destapando una megaorganización que involucra a funcionarios públicos y de las distintas fuerzas de seguridad.
En el imponente despliegue denominado Operativo Sapucay, ejecutado ayer a la mañana, Gendarmería atrapó también a otras 22 personas durante 47 allanamientos realizados en la Capital Federal, Córdoba, Chaco y Corrientes. Sin embargo, quedaban anoche alrededor de diez sujetos por detener.
Del total de allanamientos, 32 de ellos fueron en Itatí, mientras que los restantes fueron ejecutados en Sáenz Peña, Resistencia, San Cosme, Ituzaingó, Bella Vista, Goya, Jesús María en Córdoba y también en Buenos Aires. En el río Paraná, también hubo un amplio despliegue de Prefectura y por aire en la zona de Corrientes sobrevolaron al menos seis helicópteros.
El matutino local Diario Norte detalló ayer que una parte de los operativos en Chaco se centró en la Unidad Penal 7 del Servicio Penitenciario Federal (SPF), donde estaba detenido Carlos ‘Cachito’ Bareiro, uno de los presuntos caponarco que dirigía a uno de los tres clanes criminales que operaba en Itatí y que repartía la droga en al menos siete provincias argentinas.
Además, se supo que entre los uniformados tras las rejas están el sargento Carlos Víctor López y el subcomisario Rubén Ernesto ‘el Gordo’ Ferreyra, ambos con prestación de servicios en la Delegación Corrientes de la Policía Federal Argentina (PFA). En el despacho del último, los investigadores dieron con 17 panes de marihuana.
Infobae consignó ayer que la investigación del juez Torres los implicaba de forma directa. De acuerdo a la información publicada, los dos uniformados aparecían en escuchas telefónicas y se sospecha que, además de formar parte de la red narco, también revendían droga que era incautada en procedimientos armados.
En el extenso expediente que se tramita en el juzgado porteño, son tres los nombres que aparecen como los ‘pesos pesados’ de la banda. Uno de ellos es el mencionado Bareiro, mientras que los restantes son Luis ‘el Gordo’ Saucedo y Federico ‘Morenita’ Marín, quienes registran pedidos de captura pero hasta anoche continuaban prófugos.
Según los investigadores, a Morenita se le incautaron ocho toneladas de marihuana en cinco años, pero nunca logró ser atrapado.
En todo este contexto, se estima que Terán tenía “vínculo y participación activa” con los tres nombrados, por lo que ahora, con una mayor cantidad de pruebas sobre la mesa, la Justicia decidió actuar a fondo y ponerlo tras las rejas, al igual que a su vice.
Es más, voceros del caso aseguraron que el intendente también aparece en varias escuchas telefónicas en las que utiliza las palabras “dorado” y “surubí” para referirse a la droga, siendo la primera de ellas la mayor de calidad.

Operativo histórico
Las fuentes aseguraron que del procedimiento participaron unos 670 integrantes de grupos especiales de la fuerza de seguridad.
La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, viajó hasta la localidad correntina y brindó una conferencia de prensa en medio del núcleo de operaciones.
“Las imputaciones son muy duras porque pertenecer a una asociación ilícita de tráfico de estupefacientes, ustedes saben, tiene penas duras”, comentó la funcionaria a los periodistas.
Bullrich subrayó, a la vez, que “había 34 órdenes de captura y hubo 25 detenidos”, por lo que consideró que el operativo “puede considerarse exitoso”, aunque admitió que “hay prófugos todavía”.
La ministra enumeró que además fueron aprehendidos “el hermano del viceintendente de Ituzaingó”, localidad distante a sólo 90 kilómetros de Posadas, y “un prefecto que estaba en disponibilidad”.
También dijo que resultaron detenidos “abogados, escribanos, dueños de concesionarias de autos”. En la hoja de operaciones, estaba la orden precisa de incautar otra veintena de vehículos, todos con adulteraciones y documentaciones fraguadas, los cuales habrían sido utilizados para lavar dinero.
En el marco de los operativos, también quedaron detenidos varios familiares de Ricardo Piris, yerno de Terán apresado hace un mes junto a la hija del intendente, y también cayeron integrantes del vínculo familiar de el Gordo Saucedo.
La ministra recordó que este operativo “había comenzado en la Villa 21-24 (de Buenos Aires) con un procedimiento de narcomenudeo”, pero indicó que el juez Torres “siguió tirando del hilo para ver de dónde venía (la droga) y cuáles eran las conexiones”.
“Sabíamos que esto no quedaba ahí y que había conexiones mucho más profundas y que esto iba a seguir adelante”, agregó.
Bullrich dijo que “el jueves vamos a viajar a Paraguay con el Presidente (Mauricio Macri) y el gobernador de Corrientes (Ricardo Colombi)” y confió que “en la agenda está el tema del narcotráfico y vamos a reclamar por los prófugos que pensamos que están del otro lado”.
Según datos aportados por el Ministerio de Seguridad de la Nación, de la marihuana decomisada durante el 2016 en Corrientes, más del 31 por ciento fue incautada en Itatí y desde la asunción de Bullrich en el cargo se secuestraron más de ocho toneladas de droga en este punto del país, el cual con sólo 7.900 habitantes terminó convirtiéndose en una de las principales puertas de entrada al tráfico de estupefacientes.

La causa y la caída de familiares
La causa que investiga Torres se inició en mayo 2014 tras un operativo en la Villa Zavaleta, en el límite de los barrios porteños de Barracas y Nueva Pompeya, donde se detuvo a narcotraficantes que adquirían drogas en el norte del país.
El 15 de febrero, por orden del juez federal de Corrientes, Carlos Soto Dávila, fueron detenidos la hija del intendente, Mariela Terán, y su mencionado esposo, Ricardo Piris, sospechados de integrar una de las tres bandas más importantes de la provincia que trafican marihuana entre Paraguay y siete provincias.
Soto Dávila decidió los arrestos tras la investigación realizada por los fiscales federales de Corrientes, Flavio Ferrini y Carlos Schaefer, con colaboración de Diego Iglesias, de la Procuraduría de Narcocriminalidad de la Nación (Procunar).
Las sospechas sobre Mariela Terán se fueron incrementando a partir del 25 de octubre de 2013, cuando denunció el robo de su Volkswagen New Beetle, vehículo que casi al mismo tiempo fue perseguido por efectivos de Gendarmería Nacional, luego hallado abandonado, con 188 kilogramos de marihuana en su interior.
En el procedimiento donde se detuvo a Mariela Terán y Piris, se incautaron 50.000 pesos en efectivo, joyas por valor de 60.000 pesos, una camioneta Toyota Hilux, una lancha y dos motos.
Cinco días después, fueron arrestados el hermano del viceintendente de Itatí, Hernán Aquino, y Vanesa Sosa, hermana de la concejal Marcelina Sosa, junto a otras dos personas oriundas de Itatí, también por una causa de drogas.
La Prefectura Naval Argentina (PNA) detuvo a los imputados en un operativo en la ruta 118, cerca de la localidad correntina de Loreto, donde interceptó tres vehículos que transportaban más de 521 kilos de marihuana. Los investigadores destacaron que Aquino, de 23 años, tenía otras causas por narcotráfico.
Este operativo fue realizado en conjunto por Prefectura de Ituzaingó e Itá-Ibaté e Inteligencia de la Policía costera en la zona Paraná superior del río Paraguay.
El fiscal general de Corrientes, Carlos Schaefer, aseguró que Itatí, en el extremo norte de Corrientes, en la frontera con Paraguay, “antes era una zona de otro tipo de contrabando, no de estupefacientes”, pero “ahora se convirtió en una zona narco”.
El 22 de febrero, el secretario de Seguridad de la Nación, Eugenio Burzaco, alertó que se irá a “fondo, caiga quien caiga”, en los casos de narcotráfico en la frontera entre Corrientes y Paraguay, por lo cual dijo que se iban a profundizar las investigaciones para desbaratar la “connivencia política” que da apoyo en esa zona.
Roger Terán y su vice asumieron al frente de la comuna en 2013, tras imponerse en las elecciones con el 51 por ciento de los votos.


Misiones, en la zona caliente La ministra de Seguridad nacional, Patricia Bullrich, y el gobernador correntino, Ricardo Colombi, anunciaron que en pocos días más va a llegar a esa provincia un equipamiento de seguridad nuevo para dotar a la Gendarmería y la Prefectura de cara a reforzar la pelea contra el ingreso de estupefacientes.
La funcionaria nacional dijo que el narcotráfico no sólo afecta a la zona fronteriza de Corrientes, sino a todo el denominado Norte Grande del país, donde están provincias como Misiones, Formosa, Salta y Jujuy, a las cuales calificó como “puntos calientes del narcotráfico”.
“Esta es una frontera muy complicada. Pero vamos a intensificar la presencia de fuerzas nacionales. Próximamente vamos a tener esa posibilidad porque la Nación enviará más equipamiento”, dijo Colombi en la conferencia de prensa junto a Bullrich.


Apostillas de un operativo imponente Allanamiento en la UP 7.
La GNA también allanó en Chaco la celda donde está alojado Carlos ‘Cachito’ Bareiro, uno de los presuntos líderes de uno de los clanes encargados de enviar droga desde Itatí a siete provincias argentinas.

Prófugos.
A Corrientes llegaron órdenes de detención para 34 personas. Entre los sujetos que aún están prófugos, se encuentran los otros dos líderes del clan: Luis ‘el Gordo’ Saucedo y Federico ‘Morenita’ Marín, a quien en los últimos cinco años le incautaron ocho toneladas de marihuana pero nunca logró ser capturado.

Dorado y surubí.
Esas eran las palabras que utilizaba el intendente Terán para referirse a las cargas de estupefacientes, según las escuchas telefónicas ordenadas por el juez Torres. La primera de ellas se trataba de la droga de mayor calidad.

Narco oficina.
La GNA también allanó la delegación local de la PFA y detuvo a dos miembros de esa fuerza: Carlos López y Rubén ‘el Gordo’ Ferreyra, en cuyo despacho encontraron 17 panes de marihuana.


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