Pocas expectativas para el segundo semestre en los distintos sectores

A un día de la llegada del tan esperado segundo semestre de la gestión del gobierno de Mauricio Macri, pocas son las expectativas en la provincia. A pesar que desde Nación aseguran que lo peor ya pasó, distintos sectores consultados por este medio no son tan optimistas al respecto y proyectaron un panorama desalentador.
Tal es el caso de la industria forestal -considerada como una de las más perjudicadas por las últimas medidas implementadas- desde la cual precisaron que la apertura de las importaciones en conjunto con la caída del consumo interno, generaron la tormenta perfecta que desencadenó en una baja de la producción y en despidos. Apuntaron a la necesidad de reactivar el mercado y a la aplicación de medidas más proteccionistas.
Situación similar atraviesa el sector energético, en esta órbita las cooperativas advirtieron los mayores aumentos en materia de costos de distribución de energía. En consecuencia abogaron por valores más equitativos.
A todo esto se suma el reclamo de los propietarios de estaciones de servicios debido a las asimetrías existentes en la región que hicieron resentir las ventas. En este sentido, insistieron en la aplicación de un Impuesto a la Transferencia de Combustible (ITC) diferenciado en la provincia. Mientras que en el sector de la construcción, -precisaron- la paralización de la obra pública y privada dejó a más de 7 mil obreros sin trabajo.

Medidas
Estos primeros seis meses, han sido para el Ministerio de Trabajo de la provincia muy complejos, según manifestó el titular de la cartera Juan Carlos Agulla.
Indicó que las medidas que más afectaron tienen que ver con la apertura de las importaciones, hecho que impactó directamente en la construcción y la forestoindustria.
“Estas medidas generaron una disminución importante de mano de obra ocupada en la construcción. En el sector de la madera ha sido gradual y progresiva la afectación del modo de suspensión de hora y de jornadas de trabajo. Y, en el último mes, de cesantías de trabajadores de la industria de la madera en algunas empresas de la zona del Alto Paraná”, enumeró el titular de la cartera de Trabajo.
En este contexto, Agulla indicó que continúan aguardando una recuperación, lo más plena posible.“Esperamos recuperar esas fuentes de trabajo que hemos perdido en estos últimos meses en la construcción. Estamos hablando de aproximadamente 7 mil trabajadores, eso para nosotros es muy importante porque impacta en todo el sector de la economía", contó.

Sector forestoindustrial
En este contexto, el titular del Sindicato Obrero de la Industria de la Madera Eldorado (Soime), Aureliano Sánchez, manifestó que en el área de la forestoindustria perdieron las esperanzas.
“El sector está mal, principalmente la rama del terciado. Las empresas despidieron a más de 60 trabajadores en los últimos diez días”, manifestó.
 Al respecto, el secretario adjunto del Soime, Domingo Paiva, indicó que la realidad es lamentable y que no logran recuperarse luego de la apertura de las importaciones durante los primeros meses del nuevo gobierno.
“Pese a que se retrotrajo por decreto la libre importación, ingresaron productos a muy bajos precios del exterior que todavía están en stock para ser comercializados, con una diferencia de casi el 50 por ciento con respecto al costo de la industria nacional”, detalló.
A todo esto, el empresario maderero, Román Queiróz, precisó que la recuperación del sector llevará entre dos y tres años; aunque para ello será necesario la aplicación de medidas más proteccionistas.
“Estamos trabajando para aplicar rápidamente normas técnicas para que un producto que sea importado a este país cumpla ciertos requisitos de calidad y de construcción, y también barreras arancelarias”, sostuvo.

Energía
Por otra parte, el presidente de la Federación de Cooperativas Eléctricas de Misiones (Fecem), Guido Weber, sentenció que en materia de energía los primeros seis meses de la nueva administración  nacional fueron una continuidad del 2014.
“El Gobierno nacional decidió eliminar los subsidios y los 70 pesos que pagaba la provincia por el megavatios/hora, pasó a costar un promedio de 350 pesos. Y no se aumentó la tarifa de consumo en porcentaje similar al de la distribución”, ilustró.
Destacó que “el mayor aumento fue en el costo de distribución de la energía eléctrica”. Planteó la necesidad de que en el segundo semestre se logre conciliar un acuerdo con valores más equitativos. “Estamos reclamando que el precio de la energía para las cooperativas sea el mismo que paga Emsa (Electricidad Misiones Sociedad Anónima) a Cammesa (Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico)”.

Estaciones de servicios
Asimismo Faruk Jalaf, presidente de la Cámara de Estaciones de Servicio y Afines del Nordeste (Cesane), indicó que desde el sector apuestan por una recuperación a largo plazo.“Las estaciones no están bien porque los costos operativos crecen cada día. Las ventas han caído, sabíamos que eso iba a ocurrir, pero esa es la situación actual, no creemos que mejore todavía. Probablemente para el año que viene mejoren las ventas, se está tratando de conseguir el ITC diferenciado para la provincia”, señaló.
Explicó además que el expendio de combustible está ligado a otras cosas sobre todo en las zonas de frontera.
“El que va a cargar combustible aprovecha para comprar calzado, electrónica, comestibles y aprovecha el viaje. Eso trae aparejado que el comercio local sufra las consecuencias. En lineas generales, los negocios de ropa, electrónica y supermercados van perdiendo las caídas en las ventas sobre todo en las zonas donde haya una conexión física muy importante como el puente en Posadas, o como en Puerto Iguazú, o la frontera seca en Bernardo de Irigoyen”, describió Jalaf.