La radióloga de la cámara oculta volvió a su puesto

Miércoles 16 de diciembre de 2009

La técnica radióloga del Hospital Samic de esta localidad involucrada en un informe periodístico sobre la venta de bebés, hecho que derivó en una denuncia penal en su contra, se vio beneficiada con un recurso de amparo y retomó su puesto laboral.
Dicha resolución judicial va a contramano de las directivas emanadas desde la cúpula de Salud Pública, ya que días atrás el ministro José Guccione firmó una resolución derivando a otra área a Mirta García, la funcionaria cuestionada.
Según confirmó Dalila Bull, directora del Samic Oberá, la resolución del ministro “fue pasarla a la Segunda Zona de Salud para sacarla de la atención al público”. Consultada al respecto, prefirió omitir su opinión personal y remitirse a la orden superior.

De todas formas, la situación viró a principios de la semana, cuando García fue notificada del amparo que la beneficia ya que le autoriza a retomar sus actividades en el área de radiología.
“Primero la suspendieron y durante tres meses no le pagaron el sueldo, pero presentó un amparo judicial y ganó. Mientras tanto la causa sigue y hasta que no haya sentencia puede trabajar”, explicó Claudia Kusco, delegada de la Asociación de Trabajadores del Estado (Ate).
Recordó que al asumir, la nueva directora del Samic aseguró públicamente que “no la admitiría, pero hay órdenes judiciales por arriba y debe acatarlas”.
Además, opinó que García “es el eslabón más débil de la cadena y hay muchos cabezones atrás”, y reconoció que la propia radióloga le comentó que “no puede hablar porque es boleta, y sabemos que es así”.

 

“Venían tapando todo”
A partir de un informe televisivo que involucró a García y Nilda Gómez -quien era empleada municipal y tras el escándalo fue cesanteada- la entonces diputada provincial Sandra Montiel radicó una denuncia penal contra las dos funcionarias públicas por supuesta instigación al delito de supresión de identidad y su vinculación con una organización dedicada a la venta de bebés.
Dicha presentación se realizó el 8 de marzo pasado ante la Fiscalía Nº 1 de Oberá, a partir de una investigación periodística del Canal América de Buenos Aires.
Mediante una cámara oculta, el informe echó luz sobre el funcionamiento de una red dedicada a la venta de bebés, involucrando a la radióloga del Hospital Samic. Si bien los baches legales hacen difícil punir a quienes propician este tipo de actividades, al momento de la presentación, Montiel había manifestado que existe “una instigación al delito de supresión de identidad cuando una de las mujeres le plantea a la madre adoptiva la posibilidad de inscribir al niño a nombre del falso padre”.
Más allá de las acciones judiciales y las declamaciones públicas, lo cierto es que García retornó a sus funciones y ello generó indignación entre sus propios compañeros. “La verdad que con esto que pasó caímos todos en la misma bolsa”, lamentó Kusco, quien si bien subrayó que “desde el gremio no podemos ejercer un juicio, tampoco vamos a defender lo indefendible”. Denunció además que los anteriores directivos del hospital habrían tenido conocimiento de que este tipo de situaciones irregulares ocurrían puertas adentro.