Las EFA aumentaron la matrícula y buscan ser reconocidas por ley

Las Escuelas de la Familia Agrícola de Misiones (EFA) nucleadas en la asociación Unefam esperan que este 1 de mayo ingrese a la Cámara de Representantes un proyecto de ley de las escuelas de alternancia.

Cristina Bandera, presidenta de Unefam, en diálogo con El Territorio ponderó que “a pesar de la crisis económica, nuestras escuelas cuentan con más estudiantes, pasamos de 4700 adolescentes a poco más de 5100 chicos, tuvimos un aumento en la matrícula del 8% y se desdoblaron cursos”.

En Misiones funcionan 25 escuelas EFA que propician el derecho a la educación en la ruralidad y con un sistema de alternancia que permite que los estudiantes estén unas semanas en la escuela y unas semanas en la casa colaborando con las actividades de la chacra. 

“A estos buenos resultados que tenemos en la educación de las EFA queremos respaldar con una ley que reconozca la especificidad de las escuelas y el rol esencial que tiene para los chicos que viven en colonias y parajes en el interior de la provincia”, explicó.

El proyecto surgió de un borrador con aportes de docentes, la comisión de Unefam y legisladores de la comisión de Educación y tiene como base un proyecto anterior presentado hace unos años. 

Un paso adelante para las EFA será el reconocimiento por ley de la figura del docente monitor, que es el que se queda en la escuela por una o dos semanas y cumple tareas de tutor, de acompañamiento y control de los albergues y al mismo tiempo hace de nexo y articulación entre los aprendizajes de la escuela y de la casa.

“Que se reconozca el rol del monitor es una demanda de hace años de las EFA, estos docentes tienen una carga horaria que supera cualquier otra tarea docente y las funciones también son muchísimas, van más allá de lo pedagógico y tienen que ver con la contención, la inclusión, la respuesta a cuestiones sociales o familiares”, dijo.

La iniciativa -de sancionarse- dará marco a las prácticas pedagógicas, a las responsabilidades de padres y docentes, garantizará la calidad educativa entre otros puntos. A la vez, reconocerá a las EFA como escuelas con fuerte vínculo con su comunidad y su entorno.  

Consideró Bandera que “es una ley más que nada normativa, creemos que se va a aprobar, porque ya hemos hablado con el gobernador (Hugo Passalacqua), con los legisladores y gente de Educación y por la trayectoria que tienen las EFA en la provincia, dieron todo el apoyo para que se apruebe”.

Añadió que la Ley de Educación Nacional sancionada en 2006 reconoció en parte a las EFA al establecer la enseñanza rural como modalidad y también el sistema de alternancia.

Nuevas escuelas

Las dos últimas EFA creadas son las de Mártires hace seis años y la de Pozo Azul, que nació como un aula satélite de la escuela de 9 de Julio y va por su tercer año de servicio educativo.

Lamentablemente, ni el Servicio Provincial de Enseñanza Privada (Spepm), órgano del que dependen las escuelas que son de gestión privada, ni las carteras de Educación cumplieron con la apertura del tercer año en Pozo Azul, por lo que los chicos promovidos del segundo curso el año pasado se quedaron sin la escuela. “No se abrieron los cursos ni se crearon los cargos para el tercer año y tuvimos que rechazar a los estudiantes, es una pena, porque en Pozo Azul no hay tanta posibilidad de estudiar cerca en la colonia y tampoco existe el boleto gratuito, ya que no hay líneas urbanas o interurbanas”, expresó la titular de Unefam, y siguió: “No tengo conocimiento si como consecuencia de esta situación hay chicos que quedaron fuera de la escuela, esperemos que no y también esperemos que las autoridades cumplan su compromiso de continuar con la escuela y acompañar a la cohorte hasta que los jóvenes se reciban”. 

Origen

Las escuelas EFA, un modelo europeo, surgieron en la provincia hace 33 años, con impulso del fallecido sacerdote José Marx, fundador de la mayoría de estos establecimientos educativos. 

El objetivo era la promoción en educación de la población más empobrecida y alejada de los centros urbanos, era posibilitar el ingreso a la escolaridad secundaria a los hijos de chacareros y tareferos.

Concretar su idea le llevó a Marx más de una década, hasta que a partir de 1985 abren las EFA en San Ignacio, Colonia Domingo Savio, Alberdi, Campo Viera y Capioví.