#InformeDeDomingo: “Vestimenta ya no se compra y los asados en familia pasaron a guisos”

domingo 22 de abril de 2018 | 9:15hs.
#InformeDeDomingo: “Vestimenta ya no se compra y los asados en familia pasaron a guisos”
#InformeDeDomingo: “Vestimenta ya no se compra y los asados en familia pasaron a guisos”
San Pedro cuenta con más de 40.000 habitantes, que pueden acceder a servicios y contar con comercios de todos los rubros.
El comportamiento ante la inflación es similar entre quienes ofrecen y quienes demandan. En este sentido, las familias buscan alternativas para aprovechar los ingresos mensuales, mientras que los comerciantes deben hacer frente a las cargas impositivas y ofrecer ofertas para atraer clientes. Pero la situación es más difícil para las familias que no cuentan con ingresos fijos.
Graciela Dallanora es ama de casa y debió aprender un oficio al notar que los trabajos de su esposo albañil ya no eran suficientes para encarar los constantes aumentos, sobre todo en la canasta básica y servicios, como energía eléctrica.
“Empecé a realizar artesanías con materiales reciclados, principalmente botellas, me capacité y hoy ayudo bastante al principal ingreso que trae mi esposo, de no ser así debíamos cortar un montón de cosas, en el mercado mes a mes todo está más caro, la construcción tuvimos que parar, e igual con ambos aportes pesa mucha llegar a fin de mes”, afirmó Dallanora.
“La vestimenta, por ejemplo, ya no se compra como antes, los asados en familia pasaron a guisos, hay que recortar porque es muy difícil con el supermercado, la escuela de mi hijo, la luz. La venta de mis productos ayuda un montón y así como yo cada vez son más las mujeres que se dedican a alguna actividad económica”, añadió.

El lado de los comerciantes
Ante este comportamiento de recorte y adquisición de lo justo y necesario, los comerciantes que están en el rubro minimercado y panificados son los que más notan el declive en las ventas.
Además de la inflación, se ven afectados por el afluente de personas que se traslada a Brasil a realizar las compras.
“Semanalmente tenemos centavitos que marcan la diferencia y a fin de mes hacen que se sienta en el bolsillo, el precio de la harina está muy elevado, no hay trigo, por lo que vemos un año difícil con respecto a la harina para los panificados y así los demás insumos”, señaló José Pereira, comerciante de San Pedro.
Esta conjunción se agrava cuando deben estar al día con los impuestos. En este sentido, los consultados de diferentes rubros coincidieron en el alto impacto que provoca el aumento en la energía.
“Siempre tenemos que ver las prioridades, o me apura la luz, la harina, los viajantes y de tras de eso estamos siempre porque nunca nos alcanza y esto empeora cuando tienes varios empleados y por mes son casi 10.000 pesos de carga social, no llegás, nuestra situación requiere de mucha audacia y cintura”, aseguró Pereira.
La carne, vestimenta y mueblería sufrieron disminuciones en las ventas porque las familias han excluido estos productos dentro de los bienes que consideran necesario.