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Emular al equipo de 1998, el desafío

sábado 26 de mayo de 2018 | 5:00hs.
Emular al equipo de 1998, el desafío
Croacia participará por quinta vez en un Mundial después de convertirse en país independiente y su aspiración está clara: intentar emular a aquel equipo que en 1998, precisamente en su estreno en el máximo torneo de selecciones del fútbol, alcanzó el cuarto puesto.
Como objetivo secundario está salir del bucle en el que entró en sus últimas tres participaciones, en las que no pasó de la fase de grupos.
Debe ayudarle un centro del campo extraordinario en el que sobresalen Luka Modric e Ivan Rakitic, dos de los mejores mediocampistas del mundo. Más la ayuda de un Mateo Kovacic cada vez más cerca de cumplir con lo que se esperaba hace unos años de él, cuando era uno de los volantes con mayor proyección, y otras piezas de enorme valor como Mario Mandzukic, Nikola Kalinic o Ivan Perisic.
La duda, como siempre, es su capacidad para competir. Es capaz de lo mejor y lo peor. Así se comprobó en la última Eurocopa, cuando dio la sorpresa al pasar a las eliminatorias como primera de grupo por delante de España y luego, en octavos de final, cayó por 1-0 ante Portugal cuando parecía destinada a un logro importante.
El camino hacia Rusia fue pedregoso. Quedó por detrás de Islandia dentro de un grupo igualadísimo y tuvo que acudir a una eliminatoria ante Grecia, aunque finalmente la resolvió sin mayores problemas. Venció 4-1 en la ida y pasó con empate sin goles el trámite de la vuelta.
Zlatko Dalic, de 51 años, sustituyó como seleccionador a Ante Cacic justo antes de celebrarse el doble enfrentamiento ante los helenos, y cumplió la exigencia del carismático ex futbolista Davor Suker, presidente de la federación croata.
La incógnita que queda es ver si el resto del conjunto está a la altura de lo que proponen Modric y Rakitic, especialmente en defensa, además de comprobar si el conjunto balcánico adquirió ese espíritu ganador que le faltó en los recientes torneos internacionales. Su grupo no es nada sencillo, desde luego, con Argentina, Islandia y Nigeria. Necesita su mejor versión para evitar la tradicional caída en la fase de grupos.
En términos de nombres se trata de un equipo valioso. Incluso en defensa, con Dejan Lovren e Iván Strinic como líderes. Sin embargo, tiene una dificultad de la que vive preso: la irregularidad. Su recorrido por 2017 así lo cuenta.  
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