viernes 29 de marzo de 2024
Algo de nubes 27.7ºc | Posadas

Dudas por manejo de adicionales y recursos de la Unidad Regional II

domingo 22 de julio de 2018 | 6:00hs.
Dudas por manejo de adicionales y recursos de la Unidad Regional II
El subcomisario Carlos Kallus, jefe de la URII de Oberá, dijo que desde que asumió cortó con el amiguismo.
El subcomisario Carlos Kallus, jefe de la URII de Oberá, dijo que desde que asumió cortó con el amiguismo.
Daniel Villamea

Por Daniel Villamea Corresponsalía Oberá


Las actuales autoridades de la Unidad Regional II reconocieron que la distribución de los servicios adicionales siempre generó conflictos internos y sospechas, una situación que persiste, más allá de los cambios impuestos por la cúpula.
Según la reglamentación interna, al estar de franco los uniformados tienen derecho a realizar adicionales, es decir prestaciones de seguridad a favor de privados: eventos deportivos, bailes, custodia de entidades y comercios, entre otros.
Los turnos son de cuatro horas, por lo que cada policía percibe 350 pesos que abona quien contrata el servicio. Por lo general, cumplen rondas de dos turnos.
El dinero por los adicionales va al bolsillo de quienes lo realizan. Al mismo tiempo, el organizador o entidad que contrata el servicio debe abonar una sobretasa del 11 por ciento que se destina a la respectiva UR.
En tanto, para el traslado de caudales con armas largas, los bancos abonan alrededor de 25 mil pesos por mes.
Precisamente, el fondo institucional se sustenta en la sobre tasa de adicionales y la recaudación de la División Verificación de Automotores, requisito para realizar transferencias.
“El 11 por ciento de los todos los adicionales, más lo de verificación, hace un volumen mensual de alrededor de 300 mil pesos para la Unidad Regional II”, precisaron fuentes oficiales.
Se trata de un monto significativo. A su vez, los jefes de dependencias cobran como supervisores de turnos de adicionales, dinero que se deposita en las cuentas personales.
“El adicional siempre es polémico en la parte interna. Desde que estoy trato de que los servicios sean equitativos. Cuando asumí (en diciembre pasado) corté con varias cosas que estaban instauradas acá, como el amiguismo”, subrayó el comisario inspector Carlos Kallus, jefe de la UR II.

“Estoy tranquilo”
En diálogo con El Territorio, Kallus negó que esté distanciado de su segundo al mando, el  comisario Marcelo Maslowski, por presuntos desmanejos en las cuentas de la institución.
Desde hace varios días diversas fuentes de la Unidad Regional vienen insistiendo con el reclamo que habría efectuado el segundo jefe por el manejo de las cuentas internas.
“Cuando Maslowski, actualmente de licencia, quiso controlar, le cortaron la firma de cheques, siendo que por reglamento el segundo jefe debe controlar eso”, indicaron.
En ese contexto se produjo un hecho al menos sugestivo que no hizo más que atizar las versiones: la oficial encargada de los adicionales denunció que le robaron una computadora donde guardaba información de su área. Un descuido sensible a los intereses de la institución.
Para colmo, el hurto se produjo en la casa de la citada, quien radicó la correspondiente denuncia. Posteriormente, personal de Criminalística trabajó en la escena del crimen, pero no hallaron huellas.
Consultado al respecto, Kallus confirmó que la oficial “hizo una denuncia porque le sustrajeron la tablet de la casa. Tenía cargada cierta información, pero no creo que sea ninguna información sensible ni que condicione el trabajo de servicio adicional. Lo institucional se maneja en la oficina”.
Explicó que actualmente están realizando ampliaciones edilicias, pintura e invierten en los móviles. “En ese sentido estoy tranquilo”, agregó. 

Altos montos por supervisión

Según indicaron fuentes de la fuerza, a partir de un informe interno se habría corroborado que varios jefes de UR de la Provincia perciben entre 50 y 150 turnos como supervisores de adicionales. En un caso, a un costo de 350 pesos por turno, multiplicado por 150, eleva la suma a 52.500 pesos mensuales. Un jugoso extra al sueldo como jefe de UR. Dicho informe ya habría llegado a manos de las máximas autoridades de la Policía de Misiones. Lo cierto es que el manejo discrecional de los turnos como supervisores viene generando reclamos y reproches internos, al punto que varias voces coincidieron en que “distraen de la función central de la Policía, que es velar por la seguridad pública. Pero con tanta plata del privado, algunos jefes cambian de prioridades”.


Te puede interesar
Ultimas noticias